El helicóptero de emergencias sanitarias que tiene su base operativa en Cuenca ha realizado durante el primer semestre del año un total de 197 intervenciones, según ha informado hoy una de sus tripulaciones compuesta por un médico, Ignacio Garrote, un enfermero, Pedro Bonilla, un piloto, Juan Cumplido, un copiloto, Joseph Mª Ortiz y un mecánico, José González.
El Dr. Garrote ha subrayado que el helicóptero de emergencias se trata de un recurso asistencial que el SESCAM, a través de la Gerencia de Urgencias, Emergencias y Transporte Sanitario, tiene destacado en la capital conquense y constituye un elemento más de su sistema de atención integral a la urgencia y emergencia sanitaria en nuestra región.
Dos terceras partes de sus intervenciones las has realizado en la provincia de Cuenca, un 28% en la provincia de Guadalajara y un 6% en las de Albacete y Toledo.
El 84% de la actividad estuvo relacionada con patología médica (infartos de miocardio, ictus cerebral o enfermedades respiratorias entre otras) y el 16% fue patología traumática (accidentados de tráfico, laborales, etc.).
En 32 casos, el helicóptero ha trasladado a pacientes con criterio de códigos asistenciales especiales (Código Ictus, Código de Reperfusión Coronaria de Castilla-La Mancha (CORECAM) ó Código Trauma).
El equipo sanitario ha comentado que dichos códigos asistenciales son procedimientos coordinados entre Atención Primaria, el Servicio de Emergencias y los Hospitales y permiten detectar precozmente y trasladar de manera rápida y segura a los pacientes que están sufriendo patologías con alta mortalidad y cuyo tratamiento efectivo dependen del tiempo a aquellos hospitales que les son más útiles, desde el punto asistencial, aunque no sean el “referencia” o el que se encuentra más cercano.
La capacidad asistencial de los helicópteros sanitarios es muy similar a la proporcionada por las unidades terrestres ó UVIs móviles pues disponen de todo el equipamiento técnico necesario para proporcionar a los ciudadanos cuidados de soporte vital avanzado o cuidados críticos.
Pueden trasladar a cualquier tipo de enfermo o accidentado, sin limitación de edad. De hecho, es un recurso fundamental en la asistencia y/o traslado de recién nacidos o lactantes en situación de emergencia sanitaria a centros de referencia.
Cuatro helicópteros y vuelos nocturnos
Por su parte, el piloto y copiloto han comentado que el helicóptero con base en Cuenca forma parte de una flota de cuatro helicópteros de emergencias sanitarias que se encuentran ubicados en unos puntos estratégicamente seleccionados para proporcionar el mayor radio de acción posible y cubrir el mayor espacio de nuestra geografía.
No son, por tanto, recursos provincializados sino que, al igual que las UVIs terrestres, proporcionan asistencia allá donde se encuentre el paciente, independientemente de la ubicación de su base operativa.
Castilla-La Mancha es la única Comunidad Autónoma peninsular cuyos helicópteros de emergencias operan en modo nocturno y concretamente, el helicóptero que tiene su base en Cuenca (junto con el ubicado en Ciudad Real) posee esta capacidad.
Más allá de la función puramente sanitaria, a través de la coordinación que proporciona el Servicio de Atención de Urgencias 1-1-2, y a petición de otras instituciones (Protección Civil, Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, Forestales…) los helicópteros del SESCAM han ampliado sus funciones, colaborando en otras situaciones de urgencia, como la atención sanitaria preventiva en grandes incendios forestales, la búsqueda y rescate de personas perdidas ó accidentadas en lugares de difícil acceso.
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