La nueva redacción establece, también, en otro de sus puntos, solicitar al Ejecutivo velar para que cualquier producto agroalimentario que provenga de países terceros cumpla con los mismos requisitos de sostenibilidad y trazabilidad que los producidos en la Unión Europea.
Durante su intervención, el senador socialista por Cuenca, José María Toledo, ha asegurado que España, a pesar de ser el primer productor europeo de ajo -y ajo de “excelente calidad”- sufre año a año, campaña a campaña, con el aumento de los contingentes arancelarios de importación de este producto a la Unión Europea desde terceros países productores. “Este aumento de las importaciones, advirtió, incide de forma persistente y dramática en nuestros productores, llegando a afectar a más de 5.000 familias únicamente en mi provincia, Cuenca”, advirtió.
“Si somos el primer país productor de ajo de la UE, dicho producto debe suponer una gran fuente de desarrollo y riqueza para determinadas zonas productoras de nuestro país, como por ejemplo, la zona de Montalbán en Córdoba o la de las Pedroñeras en Cuenca, entre otras” afirmó.
El senador del PSOE ha destacado que nuestros productos agroalimentarios son un ejemplo de la marca España “por el excelente trabajo que realizan nuestros productores: los agricultores y ganaderos de nuestro campo, que logran poner en el mercado unos productos de excelente calidad” y ha puesto como ejemplo el ajo morado de Las Pedroñeras, “un ajo de excelente calidad que se produce en mi provincia, Cuenca” y ha asegurado que para los socialistas también es “marca España”, para acto seguido, reprochar al
al Gobierno “¿por qué no lucha con la misma fuerza y ahínco para defender a nuestros productos agroalimentarios en Europa como lo hace con otros sectores de la economía de nuestro país?”. “Esos que se venden como marca España”, agregó y tras referirse a la máxima evangélica de que “por sus hechos los conoceréis”, ha lamentado que “el Gobierno de Rajoy y el Ministerio que presidía el Arias Cañete no deben considerar a nuestro ajo como una excelente marca de referencia de la marca España”.
En este sentido, José María Toledo ha denunciado que el Gobierno ha hecho “muy poco” para defender los intereses de nuestros productores y comercializadores ante el último acuerdo de la Comisión Europea” y ha asegurado que así se lo ha hecho llegar “de forma prácticamente unánime” el sector del ajo de nuestro país quienes han considerado que dichos acuerdos se realizaron “en secreto y de espaldas al sector”. Además, ha añadido, las Organizaciones agrarias acusan a los productores chinos de competencia desleal, ya que las condiciones -tanto laborales como sanitarias- que se exigen para la producción de ajo en la UE no son las mismas que se exigen en China.
En su opinión, este nuevo acuerdo comercial con China - consecuencia la incorporación de Bulgaria y Rumanía en 2007- supone un aumento del contingente arancelario del ajo chino de importación de más de 12.300 toneladas -un aumento del 36 % para este producto y este país, hasta un total de 46.075 toneladas- y ha denunciado que “no guarda unos mínimos criterios de proporcionalidad, ya que la población de ambos países apenas representa el 6 % del total de población de la UE; siendo el aumento de todo el contingente arancelario de un 21% hasta un total de 71.245 toneladas, según el Reglamento de Ejecución nº 628/2014 de 12 de junio de 2014 de la Comisión Europea”.
El senador del PSOE ha insistido en que “no sobran ajos en la UE y, sin embargo, sí parece que sobran en España” y ha denunciado que “esta es una de las trágicas consecuencias para el sector”. A su juicio, las importaciones de ajos chinos hacen, indudablemente, que los precios caigan, “y que caigan a niveles del umbral de la rentabilidad, como están en la actualidad, tanto para el agricultor en el campo como para el precio del ajo en almacén” y ha añadido que ello “se hace todavía más patente cuando hablamos del ajo morado, que tiene unos mayores costes de producción que el ajo spring o el ajo blanco”. “De continuar por esta senda, es seguro que este sector va a salir muy perjudicado y estará abocado a un futuro muy incierto” ha advertido.
En su opinión, resulta evidente que el Ministerio de Agricultura no ha puesto toda la carne en el asador para defender los intereses de los productores de ajo de nuestro país. “Y si el problema es de falta de coordinación con el Ministerio de Economía competente en asunto de importaciones, no deja de ser un problema de gestión del Gobierno” ha reprochado. “Que la Ministra García Tejería confirme en carta de contestación de fecha 16 de mayo de 2014 y dirigida a la Consejera de Agricultura del Gobierno andaluz, Elena Víboras, que en sucesivas negociaciones se coordinarán con el Ministerio de Economía Comercio y Competitividad y realizarán un trabajo conjunto y con el objetivo de que dicha negociación no lesione los intereses del sector español del ajo, es una confirmación de la mala gestión por parte del Ministerio dirigido por el exministro Cañete, en lo relacionado con este contingente”, ha aseverado.
Antes de concluir, José María Toledo ha recomendado a los miembros de la Comisión senatorial la lectura del documento “Propuestas sobre el Sector del Ajo”, realizado por la Asociación de la Mesa Nacional del Ajo y por la Asociación Nacional de Productores y Comercializadores de Ajos, remitido a los Ministerios de Economía y de Agricultura, en el que se analiza de forma precisa esta problemática, así como las propuestas de futuro para el sector.
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