Fue la Escuela Canina Yeleen la que, a última hora de la tarde, puso fin a la extensa programación de La Alvarada, con un espectáculo de perros pastor en el palenque de Cañete que atrajo notablemente la atención del público, en un entorno como el de la Serranía Baja conquense, donde las prácticas pastoriles siempre han conformado una parte fundamental de la economía lugareña. El número de asistentes a ese acto superó la previsión de los organizadores, a una hora en la que el Huerto de Doña Julia todavía registraba una importante actividad, y donde un interminable tráfago de gentes recorría uno a uno los puestos del Mercado Medieval o se acercaba hasta el espacio gastronómico de La Alvarada, conformado este año por las barras del prestigioso Restaurante La Muralla, la Hostería de Cañete y el Restaurante Hnos. Soriano de Salvacañete.
La jornada de ayer, aunque bastante más relajada que la del sábado, fue también intensa y muy emotiva. Por la mañana se celebraron distintos actos especialmente relacionados con el eje central de la fiesta elegido para este año, el cual gira en torno a la devoción mariana y la Virgen de la Zarza. Fue en la explanada que hay junto a la ermita dedicada a la patrona de los cañeteros donde se realizó, como primer acto importante de la mañana, el concierto de Voces y Esparto. Poco después, un nutrido grupo de habitantes de Aliaga (Teruel), con el estandarte de su patrona, también la Virgen de la Zarza, se sumó en esa misma explanada a los actos que se desarrollaban en honor a la Madre de Dios. Y es que existe una profunda relación de hermandad entre los municipios de Cañete y Aliaga que gira, como no podía ser de otra forma, en torno a ese patronazgo de la Virgen de la Zarza.
Cofrades de la Virgen de Aliaga y de la de Cañete encabezaron después una procesión que partió desde la Puerta de la Virgen en dirección a la iglesia parroquial de Santiago. Junto a las cofradías, participaron en la misma la Asociación de Mujeres de Cañete, con un grupo de personas vestidas con el traje regional; el mismo grupo Voces y Esparto, que continuó su actuación a lo largo del recorrido de la procesión; integrantes de los numerosos grupos de recreación histórica que durante todo el fin de semana se han concentrado en Cañete con motivo de La Alvarada, y finalmente la gente del municipio, así como un buen número de visitantes y curiosos que terminaron por sumarse a la celebración.
Era la primera vez que durante La Alvarada se celebraba una procesión dedicada a la Virgen, y quizá una de las características más significativas del acto fue el hecho de aunar la arraigada devoción de los cañeteros y la tradición, representada por la música de Voces de Esparto y los trajes regionales de sus componentes y de las mujeres de Cañete, con la historia y la evocación de ese patrimonio colectivo que son las Cantigas de Santa María y su importante relación con la Virgen de los cañeteros. Es por ello que, a lo largo del recorrido, se hicieron diferentes paradas para dar cabida a las danzas tradicionales y paloteos de Voces y Esparto. También se llevó a cabo un acto de recreación en la propia Plaza Mayor de la villa, donde los grupos recreacionistas escenificaron la llegada a Cañete de Alfonso X el Sabio y de toda su corte, evocando un suceso histórico que acaeció en el año 1257. Durante la misma, se recordó la relación del monarca con la tradición mariana en Cañete, y se hizo sonar una de las dos cantigas que en la citada obra se dedican a la patrona de los cañeteros. Ya en la iglesia parroquial, la corte del monarca castellano, reconstruida al detalle por los recreadores, avanzó hasta la talla de la Virgen de la Zarza, que circunstancialmente permanece en esta iglesia durante los meses de verano, para prestar un sentido homenaje a la patrona de esta villa medieval. Finalizado el mismo, dio comienzo la Misa Mayor del domingo, con la actuación del coro de Voces de Aliaga y del Coro Parroquial de Cañete.
Como ya viene ocurriendo en las últimas ediciones, la gran asistencia de público a Cañete y la excelente respuesta que la completa programación despierta en cañeteros y visitantes hace que el balance que la Comisión Organizadora de La Alvarada ha realizado de esta nueva edición de la fiesta sea muy positivo. Este año, para los organizadores, se ha celebrado una de las ediciones más importantes y sentidas de La Alvarada, a lo que ha contribuido notablemente el hecho de que el culto a la Virgen de la Zarza, que se remonta hasta la época medieval, haya gozado de un notable protagonismo. Azucena Lanza, Agente de Desarrollo Rural e integrante de dicha Comisión, ha destacado la importante labor que todos los años vienen realizando, de forma desinteresada, todos los integrantes de dicha Comisión y el resto de personas que trabajan de manera completamente desprendida y hacen posible la celebración de una fiesta que, por la dimensión alcanzada año tras año, amenaza con desbordar la propia capacidad de los organizadores. Es por ello tan destacable el voluntarioso papel de todas las personas que colaboran para sacar adelante cada una de las actividades programadas. Para Azucena Lanza, es fundamental seguir contando con el apoyo institucional, la implicación del Ayuntamiento de Cañete y de la propia Diputación de Cuenca. También ha resultado vital, una vez más, el patrocinio de Global Caja y Liber-Bank, y el apoyo de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (U.N.E.D.) y de la Universidad de Castilla-La Mancha, así como la labor de soporte y mecenazgo de los numerosos bares y locales de restauración de la localidad, o de empresas como Solera Cavermon, Fuente Liviana o Norel Nature.
También las autoridades locales y provinciales han realizado un balance positivo de la fiesta. Benjamín Prieto, Presidente de la Diputación de Cuenca, ya destacó el sábado pasado, con motivo de la lectura del pregón, la importancia que La Alvarada tiene para toda la comarca. La alcaldesa de Cañete, Sagrario Ibáñez, ha destacado además la emotividad y la cercanía a la gente que ha tenido esta nueva edición de La Alvarada, una cercanía que se ha producido gracias al hecho de que el eje central haya girado en torno a la figura de la Virgen de la Zarza, por la que los cañeteros sienten una profunda devoción. Para la recién elegida alcaldesa, el relevante papel que la patrona de los cañeteros ha tenido en esta nueva Alvarada ha permitido que este año la fiesta goce incluso de una mayor aceptación entre los habitantes de Cañete. También ha destacado la necesidad de seguir trabajando para continuar logrando la implicación de la gente y para lograr hacer todavía más grande esta festividad.
De esta forma, finaliza un año más la fiesta de La Alvarada, un revulsivo para la economía local, que supone un importante impulso promocional y turístico para todo el entorno cañetero, que permite dar a conocer el significativo patrimonio monumental de Cañete, su riqueza histórica y cultural, el valor paisajístico de los parajes de la zona, y la importante oferta gastronómica existente en la comarca.
Miguel A. Badal
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