Desde el año 2008 hasta el 2012 ha ganado todo lo que se podía ganar a nivel de selecciones internacionales y ahora vuelve a asomar la cabeza y se postula como una de las favoritas al mundial de Rusia 2018.
Estamos hablando de la selección española, que con Luis Aragonés antes y con Vicente Del Bosque más tarde ganó dos copas de Europa y un mundial en el periodo de cuatro años previamente mencionado. Este equipo se ha formado poco a poco a través de la sabiduría de Aragonés y se ha afianzado gracias a la concreción pacífica y calmada de Del Bosque, pero sobre todo se ha basado en el juego de posesión y en algunos elementos claves que han sido y siguen siendo todavía los pilares del grupo y del once en el campo.
Algunos de los componentes de la actual selección española entrenada por Julen Lopetegui, que hace poco ha sellado su pase definitivo al mundial de Rusia, son parte de aquellos equipos que han hecho historia. Entre ellos está el capitán, Sergio Ramos, defensa central del Real Madrid que con tan solo 31 años no solamente es un referente del once sino que también es un icono de la generación dorada española. A su lado está Gerard Piqué, un año más joven, que no estaba presente en la Euro 2008, cuando empezó a forjarse la leyenda de una Roja bonita y ganadora, pero que no se ha perdido ninguna competición importante a partir del mundial 2010. En todas las competiciones fueron hombres clave Andrés Iniesta y David Silva, mediapuntas elegantes y de técnica excelente que representan el vértigo y la virtud del fútbol interpretado por la selección española y son los referentes para nuevos nombres como Isco, Koke o Thiago Alcántara.
Pero otro miembro de aquella selección que hizo estragos de 2008 a 2012 es David Villa, delantero que en las tres competiciones ganadas destacó como el mejor goleador y ha sido llamado de vuelta a la absoluta pese a sus 35 años y a jugar en la MLS, la liga estadounidense. De hecho, tras disputar unos pocos minutos frente a Italia, el delantero asturiano ha igualado a Julio Salinas como jugador de la selección española que ha vestido cinco camisetas diferentes. En el caso de Villa se trata, de hecho, del Real Zaragoza, del Valencia, del Barcelona, del Atlético Madrid y de los New York City, donde juega actualmente. En precedencia, Salinas había jugado con España tras haber jugado en el Athletic de Bilbao, el Atlético de Madrid, el Barcelona, el Deportivo La Coruña y el Sporting de Gijón. Pero no cabe ninguna duda de que Villa es el delantero más histórico y prolífico de la Roja, debido a sus 55 goles en 98 partidos. Gracias a sus goles y al aporte de sus compañeros, España ha forjado una leyenda futbolística sin iguales, que ha consagrado por fin la tradición del balompié español, que hasta el 2008 solo se conocía con el adjetivo de ‘furia
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