Los hechos se produjeron mientras el templo permanecía abierto a los feligreses para el rezo y la confesión. Tras la denuncia presentada por el párroco, se inició una investigación que incluyó la recogida de testimonios, el análisis de indicios en el lugar de los hechos y la revisión de las grabaciones de las cámaras de seguridad instaladas en la ermita.
Las imágenes permitieron identificar a un individuo que manipulaba los cepillos de la limosna utilizando un alambre u objeto similar. Las pesquisas condujeron a Ciudad Real, localidad en la que se localizó y detuvo al sospechoso.
El detenido, junto con las diligencias realizadas, ha sido puesto a disposición de la Sección Civil y de Instrucción del Tribunal de Instancia de Guardia de Tarancón (Cuenca).