La actuación, considerada la más importante a nivel económico dentro del Plan de Sostenibilidad Turística en Destino del Valle del Cabriel, está impulsada por la Diputación de Cuenca y financiada a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno de España con fondos Next Generation de la Unión Europea, según ha explicado la diputada de Turismo, Mayte Megía.
Entre los trabajos previstos destacan el adoquinado de la Plaza Mayor, que permitirá utilizarla para eventos turísticos y culturales, así como para celebraciones tradicionales como el Septenario de la Virgen de Tejeda, que cada siete años atrae a miles de visitantes.
El proyecto también contempla la reconstrucción de la cara exterior de la muralla frente a la Iglesia de San Bartolomé y la eliminación de la red eléctrica aérea, lo que permitirá ofrecer al público una visión más fiel del aspecto original de la ciudad amurallada.
Los arquitectos responsables, Fernando Olmedilla y Yanira Huertas, de la empresa Artecoin, han señalado que la actuación se centra en la zona comprendida entre las puertas de Calzadilla y San Juan, pasando por la Puerta de San Diego, buscando además la sinergia con otros proyectos en la zona. Entre los trabajos se incluye la recuperación de material original de las murallas para consolidarlas, ya que actualmente presentan un estado de deterioro significativo. Olmedilla ha destacado que esta muralla constituye “un frente muy predominante en la subida al conjunto histórico” y que su recuperación es esencial para preservar el patrimonio local.