Cuenca

Representantes de los trabajadores de la Universidad trasladan a Ávila su temor ante el futuro del campus de Cuenca

Redacción | Jueves 21 de junio de 2012

El alcalde de Cuenca, Juan Ávila, se ha reunido recientemente con un grupo de miembros de la Junta de Personal de la Universidad de Castilla-La Mancha en su campus de Cuenca que le han trasladado su preocupación por los recortes que se están llevando a cabo en la Universidad y que, según afirman, “han ocasionado ya la reducción de personal docente, investigador, de administración y servicios y contratas”.



 


Unos recortes que, a juicio de estos profesionales, “hacen peligrar la calidad de la enseñanza universitaria”. Sin embargo, los representantes de CCOO, UGT y STE temen incluso la desaparición de la Universidad pues consideran que “el gran recorte sufrido en el presupuesto de esta institución, sumado a la desaparición de otras partidas, hacen inviable el proyecto universitario”.

Asimismo, consideran que “el aumento de las tasas universitarias y la reducción de las becas favorecerán la desigualdad y la mercantilización de la educación”, lo que derivará en que “las aulas se vayan vaciando”.

Por todo ello, han pedido al alcalde que se haga eco de esta situación que, además, “supondría un daño enorme a la ciudad de Cuenca, desde el punto de vista educativo y económico”.

Los representantes sindicales han trasladado a Ávila que “la Universidad representa la mejor inteligencia de la región” y han lamentado que se la pretenda dejar al margen de los retos a los que se enfrenta actualmente Castilla-La Mancha.

De esta manera, se han mostrado dispuestos a abrir un diálogo y colaborar con las instituciones y el rectorado de la Universidad para “buscar soluciones”. Tampoco descartan iniciar nuevas actuaciones y seguir con las movilizaciones que ya están llevando a cabo en defensa de una universidad pública y de calidad.

El alcalde, por su parte, se ha mostrado sensible a estas denuncias y ha aseverado que “de la misma manera que no podemos permanecer impasibles ante el desmantelamiento del único hospital de la provincia, no podemos consentir que se recorte en lo que claramente es un motor social y económico para la ciudad de Cuenca”.