La Procesión Infantil de la Junta de Cofradías en Cuenca 2025 fue histórica, con más de 800 niños participando, duplicando la asistencia anterior. El evento destacó por su emotividad y tradición, con cada hermandad representada. La jornada culminó con un aperitivo para los pequeños, reforzando la pasión nazarena desde la infancia.
La Procesión Infantil de la Junta de Cofradías ha celebrado este 2025 una edición histórica, con el mayor número de 'pasetes' hasta la fecha y una participación que casi duplica a la de su mejor edición anterior. Más de 800 niños y niñas, de entre 3 y 14 años, han tomado parte en este evento, llenando las calles de Cuenca de entusiasmo y tradición.
Desde la jornada previa, con las puestas en andas del viernes, ya se palpaba la ilusión de los nazarenos más pequeños. Y desde primeras horas del sábado, la Plaza de San Andrés era un hervidero de actividad, presagiando el éxito de la procesión. La salida se produjo a las 11:00 horas, tras un emotivo padrenuestro dirigido por el delegado episcopal en la Junta de Cofradías, Joaquín Ruiz, quien presidió la parte eclesiástica junto a Jesús Albendea, representante de la V. H. de Ntra. Sra. de la Soledad (vulgo de San Agustín).
El primer redoble de la Banda de la JdC, que este año celebra su 20º Aniversario, marcó el inicio del cortejo, acompañado por un repertorio clásico adaptado a los más pequeños. El broche final lo pusieron la marcha El Sacramento de nuestra Fe en la Plaza de San Andrés y el Himno Nacional para el 'pasete' del Resucitado, seguido por la Marcha de Infantes para la Virgen del Amparo.
La mimetización con las procesiones de Semana Santa fue evidente: los más pequeños imitaron con esmero a sus mayores, aprendiendo de capataces, cuidadores y colaboradores. Cada hermandad desfiló con su guion, estandarte o cabecera completa, y en algunos casos, con música bajo las andas para guiar el paso. Se respetaron las tradiciones de cada imagen, con horquillas sonoras o mudas según correspondiera, y pequeños nazarenos llevaron cetros, faroles a escala y detalles simbólicos.
Entre los momentos destacados, el 'pasete' de la Vera Cruz desfiló acompañado por un tambor velado, y el Guion del Huerto de San Antón lució crespón negro en recuerdo de Pedro Antonio Ruiz Abarca y Marisa Aguilar. Cinco niñas vistieron mantilla junto al Yacente, manteniendo viva esta tradición, y los nazarenillos de Ntra. Sra. de los Dolores y las Santas Marías hicieron sonar carracas de madera, evocando las matracas del Sábado de Gloria.
La participación fue masiva, con especial protagonismo de la Soledad del Puente, Las Angustias (en su Centenario fundacional) y Ntra. Sra. de los Dolores y las Santas Marías, que debutaba con su 'pasete'. La procesión contó con la asistencia de numerosos rostros conocidos de la Semana Santa conquense, así como del alcalde Darío Dolz. La organización estuvo a cargo del presidente de la Junta de Cofradías, Jorge Sánchez Albendea, junto al vicepresidente Antonio Abarca, la secretaria Sara Robles y la contadora Mª del Carmen Alonso.
Tras dos horas de recorrido y con el deber cumplido, los 'pasetes' regresaron a San Andrés, donde los niños fueron recibidos con un aperitivo y un recuerdo por su participación. Una jornada inolvidable que refuerza la pasión nazarena desde la infancia y garantiza el futuro de la Semana Santa de Cuenca.