Desde el Partido Popular de Motilla nos preguntamos si los políticos de IU son los mismos desde el principio o si sufren del extraño virus en política de convertirse, según el día, en un doctor Jekyll o en míster Hyde, en alusión al personaje literario de doble personalidad creado por Robert Louis Stevenson.
Pues bien, la Sra. Calleja en su artículo de opinión publicado en algún medio de comunicación cita literalmente: “Este Equipo de Gobierno ha tomado la decisión de recurrir la Sentencia del TSJ sobre los trabajadores de Aqualia porque consideramos que es injusta, ya que estos dos trabajadores provienen de una empresa privada y no han superado los requisitos exigidos para el acceso a las administraciones públicas, recogidos en los artículos 23.2 y 103.3 de la Constitución Española de igualdad, mérito y capacidad”.
Un poco más abajo, en otro párrafo, dice textualmente: “Le recuerdo que estos trabajadores, jamás han tenido una relación contractual con este Ayuntamiento, jamás han tenido una nómina del mismo y jamás han tenido un contrato; es injusto que los despidos de una empresa privada los indemnicemos con dinero público, ya lo hace el Partido Popular con bancos y autopistas, solo nos faltaba ahora hacerlo también con los trabajadores de las empresas privadas”.
Sra. Calleja, la Ley es la Ley. Aquí en Motilla o en cualquier punto de España, se debe aplicar a todos por igual sea cual sea su condición política; lo que no puede ser, es que, si gobiernan ustedes aplican unas, si son otros (PP) ya es completamente diferente, y según parece ustedes aplican las leyes a su antojo y a su peculiar forma de ver e interpretarlas, dependiendo de sus intereses. Esto nos recuerda a la famosa frase de Groucho Marx: “Estos son mis principios. Si no le gustan tengo otros”.
Sra. Calleja, nosotros, el Partido Popular de Motilla, no decimos que el Ayuntamiento pague indemnizaciones a los trabajadores de Aqualia, lo dice una Sentencia Judicial que nosotros respetamos, es más, lo que pedimos es que dichos trabajadores vuelvan a su trabajo dentro de la plantilla municipal, como así también lo dice la Sentencia Judicial, y lo que pedimos Sra. Calleja es que todos los trabajadores sean iguales y tengan los mismos derechos, sin primar el color político de cada uno, que por lo visto eso es muy importante para ustedes.
¡Claro que la sentencia de la guardería es distinta! Pero en ambas, tanto las trabajadoras de la Guardería como los trabajadores de Aqualia, el juez da las mismas opciones: la readmisión o la indemnización. Ustedes en la primera optaron por la readmisión ¿Por qué en la segunda no? ¿Para usted, como buena sindicalista que se supone que es, no debe primar el bien de todos los trabajadores? Según usted aconsejó a los trabajadores que denunciaran, pero si la sentencia no le gusta, no la acata y recurre; desde luego, Sra. Calleja mucha coherencia política no tiene.
Y es que en los términos legales, y de la doctrina jurisprudencial (STS de 28 de abril de 2009, rec. 4614/07, entre otras), el titular del servicio recuperado se subrogaría como tercero en las previas relaciones laborales del concesionario. Los trabajadores pasarán a la administración como indefinidos no fijos, y posteriormente deberían incorporarse de manera definitiva a la Administración a través de los procedimientos de ingreso al servicio de las administraciones públicas. Para tratar de evitar la subrogación, el ente que lleva a cabo el rescate debería acreditar que en su organización ya cuenta con el personal necesario para la prestación del servicio, y que en virtud de las limitaciones legales existentes para poder llevar a cabo nuevas contrataciones no puede asumir el personal de la empresa que venía prestando el servicio. Esta limitación legal se impondría así a lo dispuesto como criterio general en el artículo 44 del Estatuto de los Trabajadores.
Pero este no es el caso, Sra. Calleja, porque tenemos trabajadores de servicios varios leyendo la lectura de los contadores del agua y trabajadores del ayuntamiento con excesivas responsabilidades. Ejemplo claro de sus políticas de Dr. Jekyll y Míster Hyde lo tenemos en el Ayuntamiento de Cuenca, donde IU pide que el Consistorio - porque está gobernado por el Partido Popular, asuma la gestión directa del agua, incluida toda la plantilla de AGUAS DE CUENCA. ¿En qué quedamos? ¿Un Ayuntamiento puede asumir los trabajadores de una empresa privada, o no? ¿O solo cuando le convenga a IU? INCOHERENCIA POLÍTICA PURA Y DURA, esta es su forma de gobernar.
Sra. Calleja, hace tiempo que en el Partido Popular tenemos claro la clase de políticos que son ustedes y cada día son más motillanos a los que se les ha caído la venda de los ojos. Ustedes ya no engañan a nadie, son ustedes los que con sus políticas dictatoriales miran por el bien de unos pocos, dejando en inferiores condiciones a los que no piensan como ustedes. Usted, en su artículo, nos tacha de dictadores, y echando mano del refranero español “Piensa el ladrón que todos son de su condición”, los dictadores son ustedes, sus dichos y hechos Sra. Calleja así lo confirman.
En su artículo de opinión, mirando la fotografía que pone de usted (que esto ya es el colmo de la arrogancia y prepotencia) solo hay que ponerla en blanco y negro y seguro que a todos nos recuerda tiempos pasados y que a ustedes no les gustan pero que no dejan de recordar, por lo tanto Sra. Calleja lecciones de usted: NINGUNA.
Y ya para terminar, le voy a decir lo que está en nuestro ADN. En nuestro ADN, ente otras muchas cosas, está la defensa de la libertad y la dignidad de la persona, ser demócratas, y ser coherentes y consecuentes con lo que decimos, y decimos lo mismo aquí que en cualquier otra parte. Ustedes, con una diferencia de 69 kilómetros, ya cambian el discurso. Sin comentarios.
Esto que ha ocurrido con este artículo, y con esta sentencia, no es más que una gota de agua que ya ha derramado el vaso. Un espejo de lo que está pasando en el Ayuntamiento de Motilla, que llevan ustedes “desgobernando” algo más de dos años, fruto de ese “pacto de perdedores”, de ese matrimonio de conveniencia entre la izquierda a la deriva de un partido socialista sin líderes, sin ideas, sin programa… sin principios, y una izquierda rancia y trasnochada que va al rebufo, a la sombra y cobijo de ese partido emergente y populista de Podemos, o de cualquier otro que les mantenga en la poltrona.
Sra. Calleja, trabajen por el Ayuntamiento de todos los motillanos, trabajen por Motilla, defiendan los derechos de los trabajadores, en fin, hagan todo aquello que hasta hoy, todavía no lo han hecho.
Ah, y una última cosa: Dejen de engañarnos a todos, aunque ya no pueden engañan a nadie.
Partido Popular de Motilla del Palancar