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El sectarismo de Prieto: imposible oponerse a la evidencia
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El sectarismo de Prieto: imposible oponerse a la evidencia

viernes 02 de noviembre de 2018, 21:20h

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Nuevamente el presidente del Partido Popular de Cuenca, Benjamín Prieto, lanza al ruedo a los suyos para que salgan en su defensa después de haber sido seriamente cuestionado tras las Primarias celebradas en su partido para elegir al presidente del PP regional, votaciones que pusieron en evidencia la falta de apoyo interno a su gestión. Y claro, eso no lo puede consentir, de manera que cada vez que sale su nombre a la palestra exige que alguien salga a apagar el fuego.

El último ejemplo es el del alcalde de Yémeda, que intenta demostrar sin éxito alguno que Prieto no es un presidente de la Diputación sectario. Y digo sin éxito porque es imposible oponerse a una evidencia, como bien saben todos los ediles y en general los ciudadanos de la provincia de Cuenca, y demuestran de manera clara las cifras.

Cuanto más tiempo pasa Prieto en su sillón de la Diputación Provincial, más se va incrementando su política de nepotismo y clientelismo. Algunos de los ejemplos más claros, la compra de un edificio a un concejal del PP de Huete o de otro en San Clemente, perjudicando a un empresario e intentando sacar las castañas del fuego a su alcaldesa. Y si uno echa un vistazo a las subvenciones dadas a municipios, pronto se da cuenta de que son en su mayoría para municipios gobernados por el Partido Popular.

Suponemos que el primer edil de Yémeda conoce también la sentencia que declara improcedente el despido por parte de Prieto de una trabajadora para colocar a una concejal del PP y miembro de su Ejecutiva Provincial. ¿Cómo se le llama a eso? Sí, sectarismo.

Está claro que el señor Manuel Martínez ha tenido que salir al ruedo para continuar con su política de escudarse en la Diputación y en su jefe Benjamín Prieto intentando ocultar que no está haciendo absolutamente nada en su municipio, pese a las necesidades que sus vecinos tienen. Y si no que se lo pregunten a sus vecinos jubilados y mayores, que no están muy contentos con él por no tener un espacio en el que reunirse. Quizá debería dejarse de dorar la píldora a su superior y preocuparse por las gentes de su pueblo. Y sobre todo no esforzarse en negar una evidencia como es el sectarismo de Benjamín Prieto.

Vicente Salvador Linuesa Moragón
Diputado provincial y miembro de la Ejecutiva Provincial del PSOE de Cuenca

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