En todo caso, Cosidó ha confirmado en declaraciones a los periodistas que la ciudad necesita una nueva Comisaría porque las actuales dependencias tienen un "espacio muy limitado, pequeño para las necesidades de la Policía Nacional".
Por ello, el director general de la Policía espera que "pronto tomemos una decisión definitiva y podemos terminar la construcción".
También el alcalde de Cuenca, Ángel Mariscal, ha confirmado que los arquitectos y técnicos de la Secretaría de Estado de Seguridad están estudiando los dos edificios para poder usarlos como dependencias policiales.
Mariscal considera que "sería un paso importante para avanzar y nos vendría bien recuperar parte del dinero invertido en estas construcciones".
Las sedes inacabadas de patronal y sindicatos, en el entorno de la Ronda Oeste, son resultado de un proceso fallido de permuta iniciado hace casi diez años, en virtud del cual el Ministerio de Trabajo cedería al Ayuntamiento la actual sede de agentes sociales, en el centro de la ciudad y en muy mal estado, a cambio de tres edificios nuevos en las afueras.
Las obras se iniciaron pero quedaron sin financiación, y a finales de 2015 el Ministerio dio por cancelado el proceso de permuta, con lo que el Ayuntamiento dispone de tres edificios sin terminar y sin una función específica: uno junto a los Juzgados de la Ronda Oeste, y dos en la cercana Ronda de San José. EFE
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