Así lo ha dado a conocer el gerente de GEACAM, Darío Dolz, que se ha mostrado muy satisfecho con el balance, pues uno de los objetivos que se marcó el parque en 2016 fue superar las 15.000 visitas.
La principal novedad de este año ha sido que el parque ha vuelto a acoger lobos ibéricos, una especial en peligro de extinción que no se veía en El Hosquillo desde julio de 2015, cuando murió el último ejemplar.
No obstante, el oso pardo sigue siendo el principal atractivo del parque y uno de los acontecimientos más celebrados este año fue el nacimiento de dos oseznos en el mes de mayo.
Con todo, tampoco han faltan los ciervos, corzos, gamos, muflones, cabras montesas y una gran variedad de aves rapaces protegidas, como el águila real.
El parque Cinegético del Hosquillo volverá a abrir sus puertas la próxima primavera tras del parón invernal. Una nueva temporada en la que, según Dolz, “desde el Gobierno regional y la empresa Pública GEACAM seguiremos trabajando para potenciar un recurso turístico muy importante para una zona tan necesitada de actividad como es la Serranía de Cuenca, teniendo en cuenta que la prioridad del Hosquillo es la preservación del entorno y la protección de los animales que viven allí”.
Si (
No(
