Según han informado fuentes provinciales, desde primera hora de la mañana dos máquinas cargadoras continúan trabajando sobre el terreno, echando tierra y compactándola en las zonas aún activas para evitar rebrotes. La superficie afectada por las llamas se estima en unos 800 metros cuadrados.
El diputado de Emergencias, Rodrigo Molina, ha visitado en dos ocasiones la zona afectada —ayer por la tarde y esta misma mañana— para comprobar la evolución de los trabajos de extinción. Molina ha destacado la “gran labor realizada por las cinco máquinas que han trabajado durante la noche”, gracias a las cuales se ha conseguido perimetrar el fuego con tierra y cal y evitar así su propagación a otras áreas del recinto.
A pesar de que el incendio está contenido, los operativos permanecerán en la planta el tiempo que sea necesario para seguir eliminando los focos que puedan reactivarse debido al material combustible acumulado.
Por su parte, los bomberos del Parque de Cuenca se han retirado tras controlar la situación, aunque seguirán realizando labores preventivas, con visitas periódicas a la zona para asegurarse de que no se reavivan las llamas.