La diputada de Patrimonio, Ferias y Turismo, Mayte Megía, ha valorado de forma muy positiva el desarrollo de esta edición, destacando que el domingo fue la jornada de mayor afluencia, con cerca de 8.000 personas abarrotando el recinto de La Hípica, especialmente durante la tarde.
Según las encuestas realizadas, el 90% de los expositores se ha mostrado satisfecho con la feria, mientras que un 9% expresó su descontento, principalmente por cuestiones relacionadas con los horarios. La mayoría de los participantes ha calificado como muy positivo el volumen de negocio alcanzado: más de la mitad de los puestos superaron los 1.000 euros en ventas, y el tramo más frecuente fue el de más de 1.500 euros.
Megía también ha subrayado el interés profesional que despierta Naturama, ya que cuatro de cada diez empresas presentes recibieron visitas de profesionales, con especial relevancia en el sector del turismo rural y en el agroalimentario, donde destacaron los quesos artesanales, la miel, los productos ecológicos como el aceite de oliva, las hortalizas o los embutidos. Además, recordó que el impacto de la feria va más allá de las ventas directas, repercutiendo en la proyección de la imagen de los productos conquenses y en la dinamización de la economía local, con un alto grado de ocupación hotelera en la capital.
La responsable de Ferias también quiso poner en valor el éxito de las actividades paralelas, especialmente las dirigidas a los más pequeños, que registraron largas colas durante todo el fin de semana en atracciones como hinchables, camas elásticas o la tirolina. “Queremos que Naturama sea una cita familiar y que los niños se conciencien desde edades tempranas en la importancia de la naturaleza y su cuidado”, afirmó Megía.