La pieza, escrita y dirigida por Alberto Cebreiro, cuenta con la interpretación de Marisa y Fernando Moya y la música de Pedro Pablo Morante. A través del personaje de Cachirulo, la obra invita a reflexionar sobre el valor de la amistad, el juego creativo, el respeto a la naturaleza y la sabiduría de los abuelos como guardianes de las tradiciones. Además, plantea una mirada crítica sobre el consumo compulsivo y el acoso comercial que sufren los más pequeños.
Esta actividad forma parte del Programa de Invierno 2025 de Títeres Infantiles, organizado por el Ayuntamiento de Cuenca, que cada sábado ofrece espectáculos familiares en el Centro Cultural Aguirre, consolidándose como una cita imprescindible para disfrutar del teatro de marionetas en la ciudad.