La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha advertido este domingo de un cambio brusco del tiempo en la península, con la llegada de una "masa de aire muy fría procedente de latitudes altas" que dejará un ambiente propio del invierno, incluso antes de la llegada oficial de la estación.
En Cuenca, se espera que las temperaturas empiecen a descender de forma progresiva, con heladas que podrían intensificarse a partir del martes, según Aemet. Este descenso llega tras varios días de inestabilidad provocados por la borrasca Claudia, que dejó lluvias abundantes en varias regiones del país.
Para este lunes, Castilla-La Mancha registrará cielos cubiertos, salvo en Albacete, con brumas y nieblas matinales. En Cuenca, se prevé una mañana con posibles bancos de niebla y cielos nubosos que irán abriéndose a intervalos nubosos por la tarde, quedando poco nubosos al final del día.
Las temperaturas mínimas en la provincia estarán en descenso, mientras que las máximas se mantendrán estables. En la región, Toledo alcanzará la máxima con 15 grados, y Albacete registrará la mínima con 4 grados. Los vientos serán flojos del sur, girando a norte a lo largo de la jornada, lo que contribuirá a un ambiente más frío especialmente por la noche.
Aemet recomienda extremar las precauciones ante posibles heladas en carreteras y caminos, especialmente en zonas rurales y en las primeras horas de la mañana, donde la visibilidad puede verse afectada por la niebla.