Ubicado en Vega del Codorno, este paraje protegido combina cascadas de ensueño, senderos accesibles y una biodiversidad sorprendente, convirtiéndose en uno de los destinos imprescindibles del interior peninsular.
El Monumento Natural del Nacimiento del Río Cuervo, en plena Serranía de Cuenca, es mucho más que un espectáculo de agua y roca. Declarado espacio protegido en 1999, este enclave natural se ha ganado un lugar destacado en la Red de Espacios Naturales de Castilla-La Mancha por su riqueza ecológica y paisajística.
Un entorno de cascadas, musgo y roca viva
El punto más conocido de este monumento natural es, sin duda, su nacimiento. Desde una cueva en la roca, el río Cuervo brota entre musgos y piedra caliza, formando una serie de cascadas que parecen sacadas de una postal. En época de deshielo o tras lluvias abundantes, estas caídas de agua alcanzan su máximo esplendor, atrayendo a numerosos visitantes y fotógrafos de naturaleza.
Pero más allá del manantial, este espacio esconde tesoros menos conocidos, como el Rincón del Cuervo, que ofrecen una experiencia más íntima con la naturaleza y permiten descubrir paisajes igual de espectaculares con menor afluencia de público.
Tres rutas para recorrer el corazón del monumento
El paraje cuenta con varios itinerarios bien señalizados, pensados para todo tipo de visitantes:
Ruta del Nacimiento: un recorrido circular de aproximadamente 1,5 kilómetros, que permite disfrutar del salto de agua y del entorno inmediato. Esta ruta es accesible para personas con movilidad reducida hasta el tramo de las cascadas.
Sendero de la Turbera: de similar longitud, esta senda atraviesa una zona húmeda con vegetación característica de suelos encharcados y gran valor ecológico.
Sendero del Pinar: para los más aventureros, esta ruta de 11 kilómetros recorre el extenso pinar de pino silvestre, ofreciendo miradores y vistas panorámicas de gran belleza.
En los alrededores del monumento, los amantes del senderismo pueden disfrutar de una red de rutas integradas dentro del Parque Natural de la Serranía de Cuenca, con opciones educativas y recreativas para todos los niveles.
Refugio de vida salvaje
El entorno del río Cuervo destaca por su diversidad biológica. Es posible observar aves rapaces como el azor o el águila culebrera, junto a otras especies más asociadas a zonas fluviales como el mirlo acuático o la lavandera cascadeña. También se han documentado pequeños mamíferos, entre ellos la esquiva musaraña de Cabrera, la ardilla roja o incluso el gato montés.
El río y sus aguas limpias acogen especies como la trucha y diversos invertebrados acuáticos, mientras que en el aire vuelan mariposas tan singulares como la Graellsia isabellae o la Parnassius apollo, ambas protegidas.
La vegetación es igualmente destacable: extensos pinares conviven con sabinas rastreras y bosques húmedos compuestos por acebos, tilos y arces. Una de las joyas botánicas del lugar es su comunidad de orquídeas, con una veintena de especies documentadas.
Centro de interpretación y accesos
Para comprender mejor este ecosistema, los visitantes pueden acercarse a la Casa de la Herrería, un centro de interpretación situado en el núcleo de Vega del Codorno (Barrio del Perchel). Allí se ofrece información detallada sobre la geología, flora y fauna del monumento, además de visitas guiadas y actividades organizadas. El edificio es accesible para personas con discapacidad.
El acceso al Nacimiento del Río Cuervo es gratuito y puede realizarse desde diferentes puntos: por la CM-2104, CM-2105 o CM-2106 desde Cuenca; por la CM-2106 desde Beteta o Valdemeca; o bien desde la provincia de Teruel por la CM-2119.
Consejos para la visita
El paraje puede disfrutarse en cualquier estación del año, pero cada momento ofrece una experiencia distinta: en invierno, las cascadas heladas crean un espectáculo mágico; en primavera, la explosión de verdor y el deshielo llenan de vida el entorno.
Es recomendable llevar calzado adecuado para caminar por terreno húmedo y, en épocas frías, ropa de abrigo. Aunque el entorno es seguro y está bien señalizado, es aconsejable consultar previamente el estado de las rutas o el clima.
Un destino imprescindible para conectar con la naturaleza
El Nacimiento del Río Cuervo no solo es un lugar de belleza sobrecogedora, sino también un ejemplo de conservación y respeto por los ecosistemas. Un rincón que invita a caminar, observar y desconectar del ritmo acelerado de la ciudad en uno de los paisajes más icónicos de la España interior.
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