Cuenca en Transición urge al Ayuntamiento de Cuenca a tomar medidas hacia una ciudad más amable para las personas

Para la plataforma, que la crisis del COVID-19 lo está cambiando todo es una verdad indiscutible. O eso creíamos. Hemos hablado durante semanas de todo lo aprendido, de la necesidad de contaminar menos, de apostar por una movilidad que haga nuestro aire tan sano como la salud de quienes deberíamos practicarla. Se nos han dictado incluso recomendaciones de distanciamiento que hacen necesario repensar la recuperación de anchos lógicos para el discurrir peatonal.

Hay ciudades, incluso, que lo han llevado a la práctica, entendiendo la oportunidad como única y el objetivo como imprescindible: Bruselas desde el próximo lunes dará prioridad a los peatones y ciclistas en todo el centro histórico y, para garantizar la seguridad, la velocidad máxima de los vehículos a motor será de 20 kilómetros por hora; Barcelona crea 21 nuevos kilómetros de carril bici y 30.000 m2 nuevos de espacios peatonales; Gijón acelerará la peatonalización de varías vías y pondrá en marcha un plan progresivo para habilitar ciclo carriles en un total de 29 calles; Vigo plantea aumentar la peatonalización de calles ya disponibles los fines de semana a media jornada laboral; Ciudad Real cierra de manera inminente calles planificadas en un futuro para su peatonalización. Y así, un largo etcétera.

¿Y en Cuenca? Desde “Cuenca en Transición” lamentamos que las políticas de las administraciones compliquen la lógica movilidad de la que una ciudad de 50.000 habitantes debería disfrutar: práctica inexistencia de aparcamiento para residentes, centros escolares colapsados de vehículos mal aparcados o un hospital en obras alejado de la ciudad son estrategias impuestas que merman la calidad de vida de quienes reclaman precisamente eso: calidad de vida y salud.

A la cabeza en la España de la desescalada, pero nuevamente a la cola en actuaciones materializadas que requieren de su implantación urgente, o será tarde para convertir crisis como la actual en oportunidades para conseguir los objetivos de desarrollo sostenible. Es ahora cuando las decisiones que se toman van a definir el futuro. Las que no se tomen o se hagan tímidamente, probablemente también lo definirán.

Es el momento de que las criaturas recuperen la calle y su autonomía sin que sea una práctica de riesgo; es el momento de implantar en el centro de la ciudad políticas que lo descongestionen de vehículos a motor, también de lunes a viernes que es cuando su carácter administrativo hace aflorar los atascos y los problemas de aparcamiento que con una nueva estrategia de movilidad serían innecesarios en una ciudad de nuestro tamaño.

Cuenca en Transición ha iniciado su andadura mediante una reunión fundacional realizada este miércoles 03 de junio en la que se aprobó definitivamente un manifiesto (se adjunta a la presente nota) así como sus objetivos y las propuestas para la ciudad de Cuenca a corto plazo.

“Cuenca en Transición” es una plataforma ciudadana abierta plural democrática y de amplia base social, compuesta por colectivos y personas de la ciudad de Cuenca preocupados por la crisis climática y sus efectos sociales y que impulsa acciones concretas en transición hacia una ciudad baja en emisiones y contaminación y alta en solidaridad. Cuenca en Transición impulsa una nueva economía descarbonizada, social, con base ecofeminista y de cercanía.

Las organizaciones constituyentes de Cuenca en transición son: Amigos de los Ríos de Cuenca, Ecologistas en Acción de Cuenca, FAMPA de Cuenca, Fridays for Future Cuenca y Limpiando Cuenca. También cuenta con personas a título individual. Cuenca en Transición incorporará (sin prisas) a muchos otros colectivos o personas con fines similares.