Este Cuenca es otro. No tiene nada que ver con el de la primera vuelta. Los de la ciudad encantada siguen de dulce en la Liga Sacyr Asobal. Este viernes con mucho oficio y con la gallardía por bandera lograron sumar su cuarta victoria de la segunda vuelta ante un peleón Sinfín que hizo la goma durante todo el envite.
Desde los compases iníciales el conjunto conquense salió a revienta calderas. Por contra el cuadro cántabro sufrió mucho la salida en tromba de unos rojillos desatados, que abrieron brecha en el marcador(5-1), obligando al técnico andaluz Victor Montesinos a solicitar con urgencia, en el minuto 7, su primer tiempo muerto que, a la postre, surtiría efecto al neutralizar la ventaja de su rival antes de llegar al ecuador del primer acto(minuto 12, 6-6). Posteriormente el Incarlopsa dio otro arreón, y con un gol de Thiago cogería una ventaja de tres goles (minuto 15, 10-7).
Al final del primer tiempo se llegaría con una mínima diferencia para los locales(15-14).
El segundo periodo fue prácticamente un calco de la primeros treinta minutos de la contienda. La escuadra conquense gozó de rentas cómodas de hasta cuatro goles(18-14), que luego quedó dilapidada con un gol del albiceleste Nicolás Zungric sobrepasado el minuto 46 del duelo (22-22). Pero un arreón final cimentado en tres paradas consecutivas de Samuel Ibáñez, que espolearon a sus compañeros, sumado al acierto en la faceta ofensiva de hombres capitales, en las filas conquenses, como Arnau, Pizarro y Simonet, pusieron de nuevo las cosas en su sitio (26-23). Aunque después en un abrir y cerrar de ojos los santanderinos se colocaron a tan solo un gol(minuto 55, 26-25), poniendo el choque en modo no apto para cardiacos.
Finalmente en los momentos de la verdad el Incarlopsa Cuenca consiguió cerrar el encuentro con una parada trascendental de don Samuel Ibañez y, con goles, con sabor a "tango-victoria", de Doldan, Simonet y Pizarro.
En resumen, el Cuenca con este triunfo se aleja de la tenebrosa zona de descenso y prácticamente deja amarrada la permanencia para continuar un curso más en la elite del balonmano español. Y lo de coquetear con Europa, para esta humilde pero a la vez ambiciosa entidad deportiva, de aquí a final de temporada será su nueva ilusión que conllevará un plus extra de motivación.
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