La alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, y el presidente de la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT), Antonio Yáñez, han presentado en el patio del Ayuntamiento una serie de proyectos e inversiones entre los que destaca la rehabilitación de la Casa del Diamantista como espacio institucional y expositivo de la Confederación.
Con una inversión de 2 millones euros, las obras comenzarán antes de que finalice el año. “Hablamos de un espacio muy querido por los vecinos de la ciudad, de la recuperación de un espacio histórico, lo que supone un hito importante que contribuye a la revitalización del Casco Histórico y, en concreto, del barrio de la Cornisa”, ha comentado la responsable municipal.
En este sentido, Milagros Tolón ha recordado que la recuperación de este edificio “es una antigua reivindicación de la ciudad y un compromiso de este equipo de Gobierno, pues para nosotros lo más importante es cumplir con nuestros compromisos, cumplir con la palabra dada, y gracias a la Confederación esto va a ser una realidad”.
Y es que “ni la pandemia, ni las catástrofes naturales, nos han impedido llevar a cabo los compromisos adquiridos”, ha indicado la responsable municipal antes de dar paso al presidente de la (CHT) y avanzar otras inversiones para la mejora del río Tajo a su paso por Toledo, como la recuperación del tramo final del arroyo de la Degollada, en redacción, y la restauración fluvial ya iniciada en la margen derecha del río Tajo.
Milagros Tolón y Antonio Yáñez han estado acompañados por Javier Díaz-Regañón, comisario de aguas de la CHT, y Gonzalo Abella, arquitecto del proyecto de rehabilitación de la Casa del Diamantista, así como por Fernando Aranda, investigador vinculado al devenir histórico del río Tajo a su paso por Toledo y clave en el proyecto de centro de interpretación que abrirá sus puertas en la Casa del Diamantista.
Tal y como ha indicado el presidente de la Confederación, la redacción del proyecto de recuperación de la Casa del Diamantista ha supuesto ya 130.000 euros. “Estamos ante un edificio singular que forma parte del perfil de la ciudad de Toledo, un edificio de la CHT desde mediados del siglo XX que no podíamos permitir en este proceso de deterioro”, ha señalado.
Así, el proyecto contempla actuaciones de consolidación y rehabilitación del edificio que permitirán su utilización futura como edificio institucional y expositivo. Entre otras actuaciones previstas en la Casa del Diamantista, también destaca la elaboración de un proyecto arqueológico para la identificación y conservación de los valores históricos de la edificación.
La Casa del Diamantista debe su particular nombre a uno de sus sucesivos propietarios, el joyero José Navarro, uno de los orfebres más conocidos entre la nobleza a finales del siglo XIX, especializado en la talla y montaje de diamantes, autor de la corona que lució la Infanta Isabel el día de su coronación.
En la década de los 70 del pasado siglo, Fernando Chueca Goitia llevó a cabo la reinterpretación y consolidación de la construcción, siendo el último uso habilitado en el inmueble el de Escuela Taller dependiente del Ayuntamiento de la ciudad.
Entre las particularidades del proyecto de recuperación destaca la instalación de una cubierta de vidrio en el patio para que su uso sea continuo y no dependa de los factores climáticos. La cubierta, como ha explicado Gonzalo Abella, simulará con formas triangulares la cara superior de un diamante en alusión al nombre popular que ha recibido el edificio que cuenta con dataciones ya en el siglo XVI.
Restauración fluvial en el arroyo de la Degollada
De otro lado, Javier Díaz-Regañón ha compartido con los medios la restauración fluvial del tramo final del arroyo de la Degollada, con el objetivo de consolidar el cauce y recuperar el adecuado funcionamiento hidrológico y su continuidad tanto longitudinal, como transversal, protegiéndolo de la erosión.
Además, se desarrollará un estudio sobre los azudes existentes en el tramo del Tajo a su paso por Toledo, con el fin de valorar actuaciones sobre los mismos de conservación, permeabilización y/o eliminación en función de sus diferentes circunstancias y con el objetivo de mejorar la calidad de la masa de agua, la dinámica fluvial del río y en definitiva, su estado a través de una mayor continuidad longitudinal.
Por último, se están llevando a cabo actuaciones de mejora y recuperación de la vegetación de ribera, mediante tratamientos selvícolas, incluyendo desbroce, poda, apeo y retirada de restos de arbolado o arbusto de pies en mal estado fitosanitario o que no son propios de un ecosistema fluvial.
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