Si tomamos literalmente las palabras del Alcalde debemos entender que todo lo que es en política se lo debe a su Asesor: ser el alcalde peor valorado de la región, un manirroto con las arcas municipales y el único alcalde de España que tiene colocado a su hermano como asesor, además de que será recordado como el Alcalde que arruinó el Consistorio y el que dilapidó más de 15 millones de euros que le cayeron del cielo, empleándolos en cambiar aceras para dejarlas peor de lo que estaban o en hacer un carril bici que a muy pocos contenta. Y por supuesto, ser el alcalde “rabietas” que se ha enfrentado a todos y por todo para hacerse la víctima.
Pero lo más triste es que quien ha gobernado los designios de la ciudad y de los conquenses ha sido el Sr. Pulido que no se presentó a las elecciones; sólo había que verlo en el día a día, cuando todos los concejales del Grupo Popular se plegaban a sus deseos y mandatos, se cuadraban ante él como el recluta ante el coronel, porque él era el jefe, el alcalde en la sombra. Él tomaba las decisiones y los electos obedecían. El nombrado a dedo por su hermano era el que dirigía la política municipal ninguneando a concejales y concejalas que en múltiples ocasiones se han enterado por la prensa de decisiones tomadas por el Asesor referentes a su área. Pero todos han callado, tenían mucho que perder. Cuando José Ramón Pulido hablaba, todos callaban y asentían… Roma locuta, causa finita…
El ya cesado Asesor ha ejercido como Alcalde en múltiples ocasiones. Como en las reuniones en Fomento o ADIF a las que iba para explicar ese bocetillo o quimera sobre los terrenos de RENFE, llevando la voz cantante por encima de su hermano e impregnando esas reuniones de un espíritu y un ambiente muy poco digno de la institución a la que representa su hermano, con actitudes poco dialogantes, de gran fuerza dialéctica y beligerantes planteamientos. Y así no se puede ir a ningún sitio.
Ahora, con la proximidad de las elecciones se descuelgan los Pulido, José Ramón y Francisco Javier, con que el primero de ellos deja el Ayuntamiento por voluntad propia al haber acabado la tarea que le encomendó su hermano, a saber, el programa URBANA y los terrenos de RENFE, pero la verdad es que no ha concluido ninguno, lo que demuestra que su trabajo lo puede hacer cualquier concejal o técnico municipal con el consiguiente ahorro para las vacías arcas municipales. Desaparece ahora de la escena política porque la crítica en el seno del PP provincial y regional era ya clamorosa. Y es que desde el principio de la legislatura el Grupo Socialista se ha opuesto a que el Ayuntamiento fuera un lugar de pago de favores del alcalde hacia su hermano, pero también desde el principio el PP pidió el cese del alcalde-bis, llegando a exigir a Francisco Javier que para volver a presentarse a la Alcaldía debía eliminar a su hermano de la primera línea política por la deplorable imagen que estaban dando.
Ahora tratan de revestir el cese o dimisión como una gracia del Alcalde a la ciudad, algo que era necesario por el ahorro municipal, pero la realidad ha sido otra: ha sido una imposición que se ha ejecutado justo al final, a tres meses de las elecciones pensando que los conquenses van a olvidar el nepotismo del Sr. Alcalde Pulido y que el Alcalde en la sombra se diluirá como un terrón de azúcar en un café con leche.
Hoy el Alcalde en la sombra no está y ahora es cuando Francisco Javier Pulido ejerce en solitario la responsabilidad de gobernar la ciudad. La pena o la suerte es que quede muy poco para las elecciones, pero el daño ya está hecho. Adiós Alcalde, adiós.
Ramón Pérez Tornero
Portavoz del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Cuenca
Si (
No(
