La pregunta de CCOO es: ¿Se puede permitir Renfe estas actuaciones con más de 5.000 millones de € de deuda? ¿Quién pagará los más de 3 millones de € de esa malísima gestión: el director general de viajeros de Renfe, el presidente de Renfe, el ministro? Parece que la respuesta es que la pagará la ciudadanía, ya que, según reconocen los propios directivos, no se implantaron estos servicios por demanda ciudadana, sino por demanda electoralista de algunos políticos.
Estos altos directivos, son los mismos que quieren sacar a Renfe Mercancías del problema en que la metió su malísima gestión, privatizándola. Estos mismos directivos son los que en 2010 hicieron perder casi 900.000 viajeros en Alta Velocidad-Larga Distancia mientras que otras compañías ferroviarias de Europa ganaban viajeros. Estos directivos son los que a fecha de hoy pierden casi 300.000 viajeros en 2011 en los corredores importantes (Madrid-Barcelona, Madrid-Andalucía o Madrid-Norte de España), y que basan la ganancia de viajeros tan sólo en la línea Madrid-Valencia, que, del 1 de enero al 15 de junio ha ganado unos 450.000 viajeros respecto a los trenes de 2010, que no eran de Alta Velocidad.
Por eso, CCOO rechaza categóricamente las ansias privatizadoras, que perjudican al negocio público y a los/las trabajadores/as de Renfe que se esfuerzan en cumplir con su obligación y en no aparecer como las víctimas de la incompetencia de sus directivos.
Incompetencia que CCOO cree que es motivo suficiente para exigir que el Director General de Viajeros de Renfe asuma su responsabilidad y, antes de dimitir, explique a los ciudadanos quién va a responder del dinero derrochado a sabiendas.
Si (
No(
