Así, la candidata regional de IU en la provincia de Cuenca ha puesto sobre la mesa la necesidad de acabar, de una vez por todas y definitivamente, con esta espada de Damocles que pende sobre las cabezas de todos los conquenses y de las y los castellano manchegos. Sabemos que el ATC está en el borde del precipicio, ha destacado, pero no podemos dejar pasar la oportunidad de empujarle para siempre.
De la misma manera, Cruz ya ha dejado claro que para ayudar a nuestras comarcas, y a la provincia en general que, como sabemos, sigue perdiendo población, es preciso invertir en agroindustria, crear empleos verdes con energías limpias y renovables y, al fin y al cabo, traer vida y progreso a esta provincia y no residuos nucleares.
Por último, Cruz también ha dejado clara, una vez más, la postura de IU en las instituciones en las que participe a partir de mayo que “no ha variado en el tiempo” y se reduce a una idea muy simple: no queremos el ATC en nuestra provincia ni en nuestra región y pedimos un plan de cierre de todas y cada una de las centrales nucleares para poder pensar en cómo y dónde albergar los residuos radioactivos producidos.