Los antecedentes de la ciudad de Cuenca como sede de un evento nacional de rugby se remontan al año 1993. La idea surgió a raíz del partido de liga de Segunda División madrileña que se disputó en la Fuensanta un 6 de marzo de 1993. Dicho partido enfrentaba al entonces llamado C. R. Bonco Cuenca contra el Cisneros, cuyo directivo era por aquel entonces vicepresidente de la Federación Española de Rugby. Este encuentro terminó con un empate a 12 (en la ida el equipo conquense se impuso por 5 a 39), pero el resultado fue lo de menos, lo importante fueron las sensaciones satisfactorias que debió llevarse el directivo del Cisneros tras su visita a Cuenca. Una vez acabado el partido se confirmaba que Cuenca sería la sede de la sexagésima edición de la final de la Copa del Rey de rugby ese año. Una noticia muy importante para el rugby conquense en ese momento, puesto que por aquel entonces el rugby en Castilla-La Mancha estaba comenzando a despegar. El club conquense fue el primero que lo hizo (este era ya su tercer año de andadura) y le siguieron de cerca Toledo y Ciudad Real, y poco después Albacete. Castilla-La Mancha era una de las pocas comunidades que no tenían Federación territorial y este partido se planteó como el escaparate perfecto para intentar dar un paso más allá, aunque finalmente no se cumplieran tales objetivos.
Una vez resueltos los cruces de semifinales, se fijó la final para el sábado 5 de junio en la Fuensanta entre el Getxo Rugby Taldea, que se habían proclamado campeones de la Copa los tres años anteriores, y el Club de Rugby El Salvador. El resultado final favoreció al C.R. Salvador, que acabó imponiéndose por 13 a 6 ante los vascos.
Lógicamente este partido no es la final de la Copa del Rey, pero es un encuentro de nivel nacional, entre las selecciones autonómicas de la Comunidad de Madrid y la Comunidad Valenciana, y es una ocasión inmejorable para que se vea buen rugby en la ciudad de Cuenca y se promocione el rugby tanto a nivel deportivo como a nivel del club que representa a esta ciudad. Así pues sólo queda animar a todos los conquenses que estén interesados en el rugby, y también a los curiosos más indecisos, a que se acerquen el sábado 1 de marzo a las 13:00 horas al campo de hierba del Luis Ocaña para presenciar estos dos partidos y disfrutar de una gran jornada de rugby en la ciudad.
J. Melenas