El Ayuntamiento de Cuenca pedirá “auxilio” al Consorcio Ciudad de Cuenca para financiar las obras de demolición del muro de la calle Alfonso VIII y la posterior reconstrucción del mismo. Dos intervenciones para las que será necesaria una inversión superior a los 400.000 euros. Así lo ha anunciado esta mañana el portavoz del Equipo de Gobierno y primer teniente de Alcalde, Darío Dolz.
Dolz ha recordado que el jueves 2 de febrero, los técnicos municipales remitieron un informe en el que alertaban del riesgo inminente de derrumbe del muro y aconsejaban una actuación urgente. Inmediatamente se convocó una reunión entre el alcalde, Juan Ávila, los concejales de las áreas afectadas y los responsables de los servicios de Urbanismo, Obras, Policía Local, Bomberos, etc. para concretar la intervención y acordar las medidas extraordinarias relacionadas con el tráfico, el transporte urbano, etc. Todas estas medidas se han comunicado por carta a los vecinos de la zona y están colgadas en la página web www.cuenca.es.
“Hay quién piensa que hubiéramos podido esperar hasta el lunes, pero antes de todo lo demás está la seguridad de las personas y para garantizar esa seguridad teníamos que empezar ya”, ha declarado Dolz. De hecho, esta misma mañana, cuando personal del Servicio de Bomberos ultimaba los preparativos retirando parte de la barandilla que corona el muro, éste ha empezado a desprenderse, por lo que desde el Ayuntamiento se ha acordado no continuar con las obras hasta las 16.00 horas de hoy viernes, cuando se corte el tráfico totalmente al Casco Antiguo. Desde entonces, las obras seguirán el fin de semana.
La antigüedad del muro, construido a principios de siglo; y las filtraciones de agua que ya provocaron la aparición de grietas y que obligaron a intervenir en 2010, son algunos de los motivos por los que este muro está dando problemas en el tramo comprendido entre el acceso a los túneles de la Cuenca Oculta y las escaleras de acceso al Colegio “El Carmen”.
Es este tramo el que, en el último año, se ha desplazado hasta 20 centímetros, mientras que sólo en el último mes lo ha hecho en 4 centímetros. Pese a todos, ni los técnicos municipales ni los estudios que se han llevado a cabo en el muro, ha advertido peligro alguno para edificios del entorno, como el Aparcamiento de Mangana, las viviendas o el colegio.
Dolz ha pedido disculpas de antemano a vecinos, hosteleros y comerciantes por las molestias ocasionadas y ha asegurado que el Ayuntamiento “tratará de ser lo más diligente posible para que las obras de derrumbe no se prolongue más de 20 días”. No obstante, ha advertido que los trabajos “serán lentos y minuciosos pues el paño se podría desprender”.
El también concejal de Urbanismo ha apelado a la comprensión de todos pues “lo que estamos haciendo es actuando para garantizar la seguridad de todo, no por capricho”.
Para terminar, Dolz ha hecho un llamamiento a todos los conquenses para que, “a pesar del frío, sigan subiendo a nuestro Casco Antiguo este fin de semana y, entre todos, hagamos posible que esta circunstancia no robe ni un ápice de vida a esta zona tan emblemática de nuestra ciudad”.
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