El pago, según ha relatado Huete, se ha hecho efectivo después de que se hayan rechazado todas las alegaciones que ha presentado la Diputación para que, al menos, los gastos que se realizaron con cargo a este proyecto - casi un millón de euros en actividades de sensibilización, promoción, difusión y elaboración del proyecto- fueran deducidos de esta cantidad.
Según ha precisado Huete, aunque en las previsiones presupuestarias de la Diputación Provincial ya se había contado con esta contingencia, el desembolso de esta importante cantidad de dinero supone un fuerte quebranto para la tesorería de la Diputación.
El proyecto ICDEA fue impulsado por el anterior Equipo de Gobierno de la Diputación, que se acogió una convocatoria de Ayudas para la Acción Estratégica de Telecomunicaciones y la Sociedad de la Información publicadas en el año 2008, aunque no llegaron a materializar nada de la obra prevista a pesar de que se concedieron dos prorrogas para poder ejecutarla.
En junio de 2011 se procedió a adjudicar la construcción del edificio por un importe de por un importe de 2.248.944,30 euros a pesar de que no tenía la disponibilidad del terreno, tal y como se confirmó en el acta de replanteo realizada el 13 de julio de aquel mismo año.
Así las cosas, sin posibilidad de iniciar las obras y con los plazos de las prorrogas para ejecutarla ya vencidos, en diciembre de 2011 la Diputación Provincial decidió renunciar al proyecto y devolver las ayudas recibidas, antes de exponerse a, una vez iniciadas, tener que reintegrarlas por haber incumplido los plazos y tener que asumir, además, el gasto de finalización del proyecto, su puesta en marcha y su mantenimiento posterior sin contar, siquiera, con un proyecto de negocio claro y viable que garantizase su solvencia económica.