El vendaval de Fukushima se ha llevado por delante el trabajo que el lobby pro-nuclear llevaba desarrollando durante décadas, y que consistía en generar una ilusión social sobre esta energía, transmitiendo al conjunto de la sociedad una sensación de seguridad y limpieza que, a todas luces, se ha revelado tan falsa como peligrosa. Esta mentira ha sido contestada al calor de los acontecimientos de Fukushima por el conjunto de la sociedad en diferentes lugares del mundo, siendo paradigmático el éxito logrado en Alemania, haciendo que su Canciller tuviera que retroceder en su postura pro-nuclear y poner fin a este tipo de energía en aquel país. En un sentido similar se manifestó también Suiza.
Así las cosas, la revista Ecologista, en su número 69, aporta a través de un monográfico dedicado a la energía nuclear, diferentes y contrastados análisis de autores de la talla de Francisco Castejón, Marcel Coderch y Ladislao Martínez, entre otros. De este modo, la revista Ecologista sigue profundizando en su papel de informar a la sociedad de un modo crítico y riguroso, poniendo en valor su independencia de cualquier lobby empresarial o partido político.
El monográfico se estructura en tres partes complementarias. En la primera se analiza la energía nuclear en un plano más global, dedicando sendos artículos al análisis del estado de la cuestión después de Fukushima. En un segundo momento se repasa la siniestra historia de los accidentes nucleares. Este primer bloque se remata con un texto sobre donde se pone en cuestión el rigor e independencia de los expertos nucleares, que han venido creando la panoplia argumentativa de la industria nuclear.
La segunda parte del monográfico se centra en España, haciendo un pormenorizado repaso a las diferentes centrales nucleares: Garoña, Ascó, Vandellós, Almaráz, Cofrentes, Trillo. Además, se aportan miradas de gran precisión a propósito de la minería del uranio en salamanca y de la presencia de armamento nuclear en Andalucía.
En la tercera parte se abordan temas relacionados con las consecuencias de nuestra forma de producir y consumir energía en el mundo. Así, se habla del cambio climático, de la quiebra del actual sistema y su íntima relación con la petrodependencia, del cenit del carbón. Pero, además, se aporta un artículo específico sobre planes energéticos alternativos que reviertan la actual situación.
La revista Ecologista, una vez más, vuelve a poner de manifiesto la necesidad de generar información, análisis y propuestas rigurosas, en el ánimo de considerar que una sociedad mejor informada tiene más herramientas para posicionarse ante una realidad que afecta a todo el mundo.
En Cuenca se podrá comprar la revista "ECOLOGISTA" en la tienda "Comercio Justo y Ecológico" situada en el pasaje de Carretería al precios de 3 Euros.
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