La vicepresidenta Sara Aagesen visitó las obras de modernización de la base BRIF en Cuenca, con una inversión cercana a 5 millones de euros. Las instalaciones mejorarán las condiciones laborales de los brigadistas y se enmarcan en un plan nacional para prevenir incendios forestales y restaurar ecosistemas.
La vicepresidenta del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Sara Aagesen, ha visitado este jueves las obras de ampliación y modernización de la base de Brigadas de Refuerzo en Incendios Forestales (BRIF) de Cuenca, una de las diez que se están renovando en toda España con una inversión global superior a los 61 millones de euros.
La base de Cuenca contará con una inversión cercana a los 5 millones, financiada a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), y se espera que las obras finalicen antes de noviembre de 2025. Actualmente, ya se han ejecutado trabajos de cimentación, estructura, cubierta y cerramientos, mientras continúan las labores de urbanización, instalaciones interiores, acabados y construcción de la nueva helipista.
Las nuevas instalaciones ocuparán más de 30.000 metros cuadrados e incluirán un edificio principal de alta eficiencia energética, una nave auxiliar para almacenamiento y mantenimiento, zonas de descanso y comedor, aparcamiento cubierto y un helipuerto adaptado a los requisitos de seguridad de la aviación civil. El objetivo es mejorar las condiciones laborales de los brigadistas, aumentar la eficacia en las operaciones y adecuar las infraestructuras a la normativa vigente.
“Seguiremos apoyando y agradeciendo el trabajo que realizan nuestras brigadas BRIF para el cuidado y mantenimiento de nuestras masas forestales, así como en la prevención y extinción de incendios”, ha afirmado Aagesen durante su visita, acompañada por responsables del proyecto.
La actuación en Cuenca forma parte de una estrategia integral de prevención de incendios forestales, restauración ecológica y mejora de infraestructuras impulsada por el Ministerio para la Transición Ecológica. Dentro de este plan, también se ha aprobado una inversión extraordinaria de 32 millones de euros para actuaciones urgentes en masas forestales en riesgo avanzado de decaimiento o desertificación.
En el reparto de estos fondos, Castilla-La Mancha recibirá más de 3,2 millones de euros, prácticamente la totalidad de lo solicitado, para desarrollar actuaciones de prevención y restauración forestal, incluyendo trabajos selvícolas, transformación de especies, control de plagas y mejora de hábitats e infraestructuras.
La vicepresidenta ha destacado el papel clave de las BRIF, especialmente en un verano con temperaturas extremas y alto riesgo de incendios, y ha querido reconocer su labor y compromiso, dedicando también un minuto de silencio al bombero forestal fallecido ayer en Paüls (Tarragona).
Con estas inversiones, el Gobierno busca no solo responder a la emergencia climática, sino también garantizar una respuesta rápida y eficaz ante incendios forestales, reforzando la seguridad y los medios humanos y materiales en territorios especialmente vulnerables como Cuenca.