La Junta de Fiestas del LIV septenario de Moya la Virgen de Tejeda nombró a primeros de este mes, el 4 de junio, a los figuras principales de los festejos, el grupo de ocho danzantes que encarnarán otros tantos jóvenes de la zona y quienes rememorarán la tradición de danzarle a una de las imágenes de mayor devoción de Cuenca y de varias zonas de España, venerada en el antiguo monasterio de Garaballa.
Los ocho jóvenes que danzarán son Oscar Pérez, Gonzalo López, Alberto Alvárez, Jesús Montero, Vicente Alemán, Pablo Montero, Alváro García y Antonio Donato. Ellos tienen entre 18 y 28 años y han nacido, residen o proceden de Moya. Unos estudian y otros trabajan. Casi todos son amigos pero tiene un mismo deseo: venerar a la Virgen de Tejeda en su septenario de una de las nobles formas que se hace: danzándole.
Los ocho lo harán ataviados con enaguas, camisa blanca y cintas de diversos colores donde predomina el azul y el rojo, los colores trinitarios de la orden que gestionó el convento de Tejeda en sus inicios y en siglos venideros. La romería tiene un trayecto de 16 kilómetros y ellos danzarán el día de la subida; el 16; el de la procesión general, el 21 y el de la bajada de Moya el 26 aunque, previamente, ensayarán por los diversos pueblos de la mano del maestro. Harán dos danzas: una con castañuelas y otra con palos. Las dos conocidas en los 36 pueblos del antiguo Marquesado de Moya. Ellos, igual que la imagen de la Virgen y sus portadores, descansarán en las llamadas mesas, lugares de intercambio de la Perla del Marquesado entre los vecinos de los pueblos y otros espacios.
En el mismo acto de proclamación de los danzantes se hizo lo mismo con las damas. Moya también tiene sus damas en una tradición arraigada desde que la Duquesa de Alba visitara sus tierras hace unos siglos y la junta de aquel entonces decidiera nombrar a unas jóvenes para acompañar a la Virgen.
En este septenario son 21 jóvenes de las que saldrá la reina. Ellas son de siete pueblos del Marquesado como Moya, Landete, Talayuelas, Casillas de Ranera, Manzaneruela, Garaballa y Fuentelespino y también habrá damas infantiles como en el pasado septenario. Todas irán vestidas con el traje de serrana.
Moya vuelve a revivir su historia y hará historia como hace desde 1639 cada siete años entre el 16 y el 26 de septiembre, en el llamado septenario, con la llamada subida de la virgen al lugar que,en su día, fue cruce de reinos y hoy recupera a paso lento su imagen de espacio señero.
La junta organizadora de los festejos y el Ayuntamiento de Moya celebraron el 15 de mayo el acto del decreto en el que volvía a aprobarse la petición de realización de fiestas y de subida de la Virgen de Tejeda a tierras moyanas. En ese día un grupo de jóvenes de los cuatro barrios moyanos, de La Casa de
Pedro Izquierdo, Los Huertos, El Arrabal y Santo Domingo, expresaron su deseo de danzar al maestro, Constancio Sáez Argudo, que danzó en 1947. Él tiene el cargo vitalicio hasta su cese y lo heredan familiares.
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