Bajo el título “Vestir una obra de Arte” se presentó el viernes 19 de agosto en la localidad conquense de Mira, un desfile en el que se mostraron kaftanes, foulares y pañuelos diseñados, pintados a mano y realizados en seda natural 100% por Tomás Viana.
La muestra llevaba en la cabeza del artista desde hacía varios años, materializándose éste con una propuesta efímera y novedosa. Durante largo tiempo se dedicó a realizar pañuelos y foulares, derivando finalmente en la realización de bellos kaftanes que han conformado la composición de dicho evento.
Como ya tiene acostumbrados a mireños y visitantes durante las fiestas de verano, Tomás Viana, realiza alguna exposición que cuenta siempre con gran expectativa y acogida por parte de sus vecinos. Este año no ha sido menos, llenando como siempre el centro social de la localidad.
Durante las diferentes exposiciones que ha realizado en la población en los últimos años, se ha podido asistir a diferentes maneras en la concepción artística por parte de Tomás Viana. Se ha podido ver en su obra el hiperrealismo, el pop, la figuración o el expresionismo, siempre bajo su atenta y personal visión. También se ha zambullido en el campo escultórico, a través del geometrismo del metal, o la utilización de diferentes soportes como lienzo o papel, desembocando en este momento artístico en una comunión entre moda y Arte.
En el mundo del arte no es la primera vez que se produce esta simbiosis entre el diseño y la moda, ya la rusa Sonia Delaunay, en los albores del siglo XX creó diseños con su propio arte. Lo que vuelve a poner sobre la mesa Tomás Viana es el proceso manual de sus diseños, creaciones totalmente originales cuyas sedas son empapadas por la forma y el color.
Tomando motivos que se mueven entre la abstracción, la figuración o el expresionismo, que ha plasmado en estas vaporosas prendas, deleitó al numeroso grupo de personas que se concentraron para admirar la propuesta materializada en sus creaciones.
El acto, que dio comienzo con las palabras del artista acerca del trabajo realizado para dicho evento, se complementó con la visualización de un vídeo en el que explicaba el laborioso proceso de la pintura sobre seda, desde su concepción hasta su materialización en prenda (dibujo, pintura, secado, fijación, etc.)
Para que el acto se pudiera llevar a cabo contó con seis modelos excepcionales, entre las que se encontraban chicas de la población (Julia Mª, Mª José, Pilar, Marisol, Lucía y Sofía) que se prestaron a lucir las diferentes prendas. Así, la colección se fue mostrando en la pasarela con la muestra de seis kaftanes, a los que siguieron seis foulares, terminando con otros seis kaftanes, todos de diseños diferentes y variados. Sobre la pasarela, en el techo, se podían ver a modo de colgaduras, diferentes pañuelos que conformaban la obra. Al terminar el acto, las modelos se pasearon entre el público para poder admirar el trabajo manual realizado en cada uno de ellos.
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