El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha defendido la importancia del sistema educativo para "salir de las crisis" y ha abogado por "blindar" la enseñanza para evitar recortes si en el futuro "la situación se tuerce" durante su intervención en el acto del Día de la Enseñanza, que ha acogido el Teatro Auditorio 'José Luis Perales', de Cuenca.
García-Page ha apuntado que los castellanomanchegos nacidos a partir de 2007 "han escuchado permanentemente la palabra crisis", al mencionar la económica, la pandemia y la guerra de Ucrania, y ha lamentado que en el pasado "hubo quien llegó a pensar que de la crisis se salía cerrando colegios o universidades", pero ha defendido que para salir de una crisis es necesario "un buen sistema educativo" y no dejar de educar.
El presidente del Ejecutivo autonómico ha tenido palabras de agradecimiento para todos los premiados, un total de 34, que han recibido una distinción en este Día de la Enseñanza, y ha recordado que el trabajo de los docentes es "insustituible".
García-Page ha cerrado el acto en el que se han entregado reconocimientos a profesores, alumnos, centros o personal de Administración de toda la región, además de los nuevos premios a las 'Escuelas embajadoras” y a la trayectoria profesional.
Por su parte, la consejera de Educación, Cultura y Deportes, Rosa Ana Rodríguez, ha elogiado también a los premiados, por haber dado la talla "en situaciones adversas" como a los equipos directivos de los centros educativos y ha también ha mostrado su satisfacción por la creación de premios como los de la trayectoria profesional porque "debéis ser un referente por vuestra labor”.
Al acto han acudido cerca de 700 personas, a las que ha dado la bienvenida el alcalde de Cuenca, Darío Dolz, que ha resaltado el papel de la educación "para cambiar la sociedad", mientras el presidente de la Diputación provincial, Álvaro Martínez, ha resaltado el cambio experimentado en la última década, en especial en la escuela rural.
A las puertas del Teatro Auditorio han protestado algo más de 250 personas convocadas por los sindicatos CCOO, UGT, STAS y CSI-F para reclamar mejoras laborales para trabajadores como los auxiliares técnicos educativos (ATE), el personal de cocina o los técnicos de lengua de signos.
Se trata de cerca de 800 trabajadores en toda Castilla-La Mancha que, según los sindicatos convocantes, tienen contratos de 30 horas o menos al mes y son despedidos en verano, además de subrayar que la mayoría de esta plantilla son mujeres por lo que existe una "doble discriminación".
En este sentido, y durante su intervención, García-Page ha aludido a esta protesta y ha reconocido que el sistema educativo siempre es "susceptible de mejora" y ha abogado por buscar una solución para las reivindicaciones.
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