El objetivo es producir instrumentos o prototipos replicables y a disposición de la comunidad de usuarios apostando por una arquitectura de código abierto. Todos los elementos que hemos desarrollado están realizados bajo criterios del código abierto con la intención de que puedan difundirse, replicarse, evolucionar, implementarse y mejorar libremente entre distintas comunidades de usuarios para la reconquista de su derecho a la ciudad.
El resultado del taller se presentará el sábado 12 de diciembre a las 13:00 horas en el mismo pabellón.
Elisa Terroba y sus “Libros Líquidos”
El trabajo de Elisa Terroba gira en torno a los discursos, el código, la construcción y la deconstrucción de los libros, convirtiéndolos en libros-objeto. Colaborando con el Festival Permanencias, impartirá un workshop que servirá para reflexionar sobre el libro como soporte de la memoria en contraposición al soporte digital. El taller consistirá en la elaboración de una serie de esculturas efímeras, libros hechos con hielo, para colocarlas después en el espacio urbano de San Antón.
El taller tendrá lugar entre el martes 8 y el miércoles 9 de diciembre, de 16:00 a 19:00 en el alfar de Pedro Mercedes en San Antón. El próximo sábado se llevará a cabo la instalación “Libros Líquidos” con los resultados: se desmoldarán los libros y se colocarán en distintos puntos del barrio para que el/la usuario/a pueda visitarlos y observar su proceso de derretido.
Elisa Terroba (Arriate, Málaga, 1986) es Licenciada en Bellas Artes por la Universidad de Castilla-La Mancha y realizó un Máster en Arte Contemporáneo. Investigación y Creación por la Universidad de Vigo.
Elisa Terroba es una artista del lenguaje. Desarrolla su trabajo en torno al código, su construcción y su deconstrucción para cambiar los discursos y, con ellos, las diferentes formas de pensar.
A medio camino entre la objetualización y la digitalización, Terroba convierte al libro el objeto, cosificando el código, y elabora una nueva codificación de lo digital, transformando estructuras a través de una estética del dateo. Además, se acerca a la poesía, que genera los discursos más flexibles y fluidos, permitiéndole una mayor libertad en su deconstrucción y reconstrucción.
Su obra se puede encontrar ya en las colecciones de la Biblioteca Nacional, la Casa de Velázquez en Madrid y el Centro de Arte Contemporáneo Fundación Antonio Pérez en Cuenca.