No es casualidad que Castilla-La Mancha sea ahora la región mejor comunicada, aseguró Barreda añadiendo que esto es consecuencia de la estrategia diseñada por el Gobierno regional que, además, tiene en mente el desarrollo de otros proyectos como la plataforma logística en Tarancón para aprovechar su posición estratégica y atraer así a nuevos inversores que valoren la buena comunicación.
El presidente, que concluyó en Tarancón la segunda jornada de campaña electoral, ironizó acerca del último acto público del PP en la plaza de toros de Toledo, que, dijo, tuvieron que llenar con gente de otras comunidades autónomas como Valencia, Castilla y León, Extremadura o Madrid.
El presidente recordó que se vence cuando se convence y esto es posible con argumentos, explicaciones y cuando se demuestra que se conoce la realidad y que se está codo con codo con los paisanos, trabajando juntos.
Precisamente Barreda quiso lanzar un mensaje a todos los candidatos socialistas a los que recordó que la campaña está para argumentar y no para difamar ni engañar. Tenemos que ser muy cuidadosos con las palabras y los escritos porque cuando conviertes al adversario en enemigo parece que ya nada importa?, apuntó Barreda que insistió en que en democracia no debe haber enemigos, sí adversarios a los que se les gana, afirmó, practicando el juego limpio y siendo mejores, pero siempre respetando las reglas del juego.
Las elecciones se ganan en las urnas
Asimismo consideró que las elecciones se ganan en las urnas, el día 22, y no en las encuestas ni en los datos previos como los partidos de fútbol, que se ganan en el césped. Ese día tenemos la oportunidad de emitir libremente nuestra opinión y esa es precisamente la grandeza de la democracia apuntó Barreda que recordó que todos los votos valen igual.
Precisamente y haciendo referencia a la igualdad el presidente subrayó que a pesar de lo que muchos digan, no es lo mismo que gobiernen unos u otros, los progresistas de los que no lo son, los que defienden el interés general sin interés de ninguna clase de los que quieren ganar por intereses.
La diferencia esencial es que a los progresistas la igualdad radical es lo que nos mueve, señaló el candidato socialista para quien no hay nada por encima de nuestra condición de seres humanos, y eso es, añadió, lo que nos hace iguales. Para Barreda lo contrario de la igualdad no es la diferencia, sino la desigualdad, y contra la desigualdad, dijo, nosotros nos sublevamos.
Trabajar para la igualdad significa, en su opinión, lograr que todos los niños desde su más tierna infancia tengan igualdad real de oportunidades y que no haya discriminación en el origen. Y para conseguirlo hay que garantizar una buena educación desde el primer momento, como estamos haciendo en Castilla-La Mancha, apuntó el presidente que destacó el esfuerzo inversor sin precedentes del Gobierno regional para consolidar este sistema educativo público, el instrumento más eficaz para asegurar la igualdad real de oportunidades.
Por eso, añadió, la educación es una de las grandes prioridades de su Gobierno, y lo seguirá siendo los próximos cuatro años junto a las prestaciones sociales y la sanidad. A este respecto advirtió que Castilla-La Mancha seguirá con ese compromiso y seguirá estando a la vanguardia en España porque es de justicia tras el importante esfuerzo común que han realizado todos los castellano-manchegos para lograrlo.
Según dijo, tenemos que estar orgullosos por tener uno de los mejores sistemas sanitarios de toda España, un sistema igualitario, que permite atender sin discriminación a todos los ciudadanos independientemente de sus circunstancias. Por ello, apostó por seguir en el mismo camino y continuar mejorando la sanidad como ya se está haciendo en Cuenca con un nuevo hospital.
El presidente destacó la solidaridad profunda de lo público y lamentó que haya gente insolidaria que rechace este modelo que garantiza la universalización de la sanidad. Así, recordó la situación que se da en países como Estados Unidos donde sin tarjeta de crédito es imposible el acceso al sistema sanitario provocando la ruina de muchas familias. A mí ese modelo no me gusta, prefiero el nuestro aseveró Barreda que advirtió que para mantener este sistema socio sanitario público los castellano-manchegos destinan más de 10 millones diarios, de ahí que animara a todos a defenderlo y valorarlo porque, aseguró, merece la pena.
El candidato socialista insistió en que esta situación no es irreversible y que bastarían unos años de desinversión por parte de un gobierno que no priorice estas políticas para que el sistema se deteriore considerablemente, tal y como sucedió en Gran Bretaña. Yo no quiero que eso pase aquí, pero tenemos que ser conscientes de que es posible, matizó.
Para Barreda son precisamente estas cuestiones las que hacen que no de igual quien gobierne, al tiempo que confirmó que seguirá manteniendo la educación, la sanidad y las prestaciones sociales como prioridades porque, dijo, lo que da sentido a nuestro trabajo es el compromiso con las personas, con hombres y mujeres concretos.
Las personas, en el centro de la gravedad política
Según dijo hay que situar a las personas en el centro de la gravedad política e insistió en que su principal objetivo desde el Gobierno castellano-manchego es trabajar por una sociedad que permita que todos los seres humanos vivan con dignidad, por eso merece la pena trabajar, declaró.
El presidente reiteró su compromiso por el interés general, pero especialmente por aquellas personas que más ayuda necesitan de los demás insistiendo en que eso es precisamente lo que da sentido a la política. A este respecto reconoció que la coyuntura actual es complicada e insistió en que nadie tiene la fórmula mágica para solucionarla, ni Rajoy ni Cospedal, y, añadió, sería lamentable que si la tuvieran no la compartieran en beneficio del interés general.
Así, explicó que estamos viviendo la mayor crisis de la historia y que aunque el margen es pequeño, todos debemos agotar nuestro margen de actuación por pequeño que sea, y esta actitud ha de partir de la colaboración, la unidad y la cohesión social porque todos juntos tendremos más posibilidades de superar las dificultades, señaló el presidente que lamentó que haya quien en vez de colaborar se dedique a poner palos en la rueda, como De Cospedal, que no ha ayudado a los castellano-manchegos en ningún momento, evitando incluso reunirse con los sectores implicados y el Gobierno regional en la problemática del agua, por ejemplo.
Barreda recordó que De Cospedal se debe a otros intereses y por eso ha preferido apoyar a Valcárcel y a Camps antes que a sus propios paisanos.
El presidente se dirigió a los presentes para solicitar que con argumentos y con razonamientos expliquen que el 22 de mayo hay una cita democrática muy importante en la que, insistió, lo que se decide es algo que afecta a la calidad de vida de las personas, y que es la alcaldía y la presidencia de la región, no otra cosa como algunos pretenden hacernos creer.
Codo con codo con sus paisanos
El candidato a la alcaldía por Tarancón, Raúl Amores, destacó el apoyo de Barreda que, dijo, ha estado codo con codo con nosotros día a día, para proyectos tan importantes como que tengamos un centro de especialidades, pero también reuniéndose con los empresarios de Tarancón para luchar contra el desempleo, por eso no da igual quien gobierne, aseveró.
Amores insistió en la necesidad de respetar todos los pilares del bienestar social y recordó que son programas concretos del Gobierno de Castilla-La Mancha los que aseguran estos servicios en Tarancón. Y los perderíamos, dijo, si llegara a gobernar el PP.
El candidato criticó a De Cospedal por proponer iniciativas como eliminar el 50 por ciento del personal público y recordó que son estos técnicos los que permiten que los colectivos que trabajan con personas que más ayuda necesitan de los demás funcionen. Amores comparó esta actitud con la de Barreda que, dijo, sí se preocupa por el movimiento asociativo y por los más necesitados.
Asimismo destacó los numerosos proyectos que han podido desarrollarse en Tarancón gracias a la colaboración institucional con el Gobierno de Castilla-La Mancha y que, añadió, no servirán para nada si no hay cooperación que los posibilite.
A este respecto subrayó que para el Gobierno de Barreda lo que importan son las personas, y lo comparó con otras personas que, afirmó, están más pendientes de ser ministras que de Castilla-La Mancha. Con un a ganar se despidió Raúl Amores de las más de 700 personas que se concentraron en el pabellón de ferias de Tarancón para recordar el lema de los socialistas castellano-manchegos: no da igual.
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