Que iluso y soñador se trataba de la ciudad de Toledo, medité que sería el nuestro en forma de “compensación”, una vez que el Consejero de Presidencia y Administraciones Públicas y portavoz del gobierno regional anunciará el (06-07-2013), que el Conservatorio Superior de Música se ubicaría en Albacete, asumiendo que el Consejero de Educación, Cultura y Deporte, el albaceteño Marcial Marín, comunicaba el (24/08/2013) que la “Junta se va a volcar para que sea una realidad el proyecto de creación de un Conservatorio Superior de Música en Cuenca”, capital de la región que siempre se ha postulado para su ubicación.
Del mismo modo, pensé que podría ser Cuenca, y que habían errado a la hora de dar la notica, que “optimista e idealista”, apaleando al número de hospitales que ya tiene esa ciudad (capital regional, apellido al que también optaba la ciudad de las Casas Colgadas, pero a cambio le concedieron el de “Cenicienta de Castilla- La Mancha”), ya que localizados en la red del SESCAM existen: Hospital Virgen de la Salud, Geriátrico Virgen del Valle, Hospital Nacional de Parapléjicos y con el citado por el Consejero de Sanidad, al inicio “el Universitario”, suman cuatro; apaleando a los datos demográficos elaborados por Instituto de Estadística de Castilla-La Mancha, cifras oficiales de población del padrón a uno de enero de 2012, Cuenca Capital, contaba con 57.032 habitantes, y Toledo Capital suma la cifra de 84.019, resultando una diferencia de 26.987 habitantes.
Como Conquense tengo que decir que me hubiera “encantado” que el elegido para continuar las obras fuera el de mi ciudad, me imagino que los datos numéricos de población anteriormente citados habrán pesado en la decisión de la Junta de Comunidades, “la proporción de población que se concentra en una determinada zona obedece y estriba ampliamente a las ofertas que en servicios primordiales, los gobernantes presten a los ciudadanos, tales como Sanidad, Educación, y Felicidad Social a los más mayores”; evidentemente si en esa zona urbana no se concentran esos bienes de soporte material que presten los servicios mencionados, este contexto incitara a la población a abandonar la ciudad, y a no contar con nuevos interesados en habitar en ella y en su provincia; quizás una de la razones principales por las que no crece Cuenca, en número de habitantes en muchos años, coexista en esa falta de preocupación de los dirigentes que ha tenido la ciudad, y la Junta de Comunidades, (PP,PSOE) en dotar a la misma de esos servicios básicos e imprescindibles, o mejorar los existentes adaptándolos a los nuevos conocimientos tecnológicos y científicos ,que no la dejen fuera del progreso, no en vano en base a la población se calculan los diferentes baremos y ratios de servicios. ¿No, se lo han preguntado nunca? En Cuenca capital, y provincia nos estamos quedando clausurados y bloqueados. “Ese es el futuro que nos prometieron”.
Pongo de ejemplo el “Hospital Virgen de la luz”.
La ciudad de Cuenca, cuenta con un hospital (página web del SESCAM en construcción, como el nuevo hospital Universitario, que también estaba en edificación), el hospital fue inaugurado en el año 1964, acometiendo la ampliación más importante en el año 1985.
El nuevo hospital Universitario, o “hospital vanguardia”, tendría 190.000 metros cuadrados de parcela; 1.600 plazas de aparcamiento; 193 consultas; 508 camas hospitalarias, (el 68 por ciento de ellas individuales); 52 boxes de urgencias; un salón de actos de 250 plazas; un centro de atención a la infancia y un hotel de pacientes. Con una arquitectura contemporánea, un edificio inteligente y dinámico. Hablamos de una inversión mínima de 130 millones de euros, la inversión más grande que “se iba hacer en la capital Conquense”.
Nos imaginamos, lo que hubiera supuesto una inversión económica de esa magnitud para la ciudad y provincia, hubiera sido un referente general, el motor mercantil que tanto necesita, se hubiera calificado como la primera empresa en crear los “anhelados puestos de trabajo”, ¿habría aumentado la población en Cuenca, con esta transformación económica?, la respuesta es muy fácil, verdad.
Las obras, que medio se empezaron quedaron definitivamente paradas el (18/11/2011), cuando el Consejero de Sanidad, José Ignacio Echániz, afirmo que el Hospital Universitario de Cuenca, tendrá que esperar a que la situación económica remonte y permita inversiones; la Sanidad comento el Consejero se financia en buena parte con el IRPF y con el IVA, yo me pregunto:¿En Cuenca, no pagamos impuestos?, ¿Por qué no hacer el de Cuenca, y que espere Toledo?
Pero esta promesa, que nos hicieron (PP, PSOE), en época de elecciones municipales, y a la presidencia de la Junta de Comunidades, es un sueño de castillos en el aire, a manera de fantasmas en forma de inversiones para Cuenca, que al despertar nos ha devuelto a la cruda realidad.
Quiero dejar claro que no tengo nada en contra de Toledo, pero entenderán que me llame la atención, que elijan una ciudad, en detrimento de otra de la misma región, y curiosamente siempre la misma “Criada”.
Ahora me dirán que “manipulo” y unos contestaran que todo es debido a la herencia recibida del anterior gobierno, y eso ha impedido continuar las obras del nuevo hospital, pero en Toledo, sí las recomienzan. Los otros dirán que si hubieran continuado en el gobierno lo habrían terminado, hace décadas; desde luego hay que darles la razón, que desde que se hicieran las transferencias sanitarias por parte del Estado a la comunidad de Castilla-La Mancha, (año 2002) han contado con tiempo más que suficiente para haber realizado de sobra el proyecto sanitario. Para aquellos que piensan que no es necesario el nuevo hospital, que se den una vuelta por los módulos (barracones), prefabricados para alojar las consultas de salud mental, con el riesgo de estigmatización a estos pacientes. Ampliare más información en el próximo capítulo, “historia del nuevo Hospital Universitario de Cuenca”.
Rafael Torres
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