El PSOE de la provincia de Cuenca ha criticado la paralización indefinida de las obras del nuevo Hospital, anunciada hoy por el consejero de Sanidad y que supone “un perjuicio tremendo para los ciudadanos de esta ciudad y de esta provincia, que se van a quedar sin una infraestructura totalmente necesaria y en la que el Gobierno de Barreda ya había hecho importantes inversiones”.
Los socialistas conquenses apuntan que “con este anuncio se confirma lo que ya nos temíamos y es que Cospedal ha faltado a su palabra, pues se había comprometido a hacer el nuevo Hospital en esta legislatura. Sin duda, es una nueva falta de respeto y de compromiso por Cuenca, que está claro que la señora presidenta va a dejar abandonada”.
Es más, “la importancia del nuevo Hospital no sólo radica en que los conquenses necesitamos este recurso fundamental para la mejora de la atención sanitaria, sino que suponía un verdadero empuje para la economía de la provincia y de la región, con la creación de más de 500 puestos de trabajo y un apoyo esencial para los emprendedores de la tierra”.
Además, “el señor Echániz ha afirmado que se han paralizado todas las nuevas infraestructuras sanitarias previstas en esta provincia, como Centros de Salud, lo que pone en evidencia que la Sanidad no es una de las prioridades del Gobierno de Cospedal y que va a dejar a nuestros municipios en la estacada, después de asfixiarlos económicamente al no pagar las deudas que tiene con ellos”.
Esperan ahora “la reacción del PP de Cuenca, que una vez más denota que no pinta nada para su jefa, como ésta viene demostrándoles una y otra vez, por ejemplo al no contar con ningún consejero de esta provincia en el Gobierno regional o imponiéndole paracaidistas y cuneros en sus candidaturas”.
Por cierto que este anuncio, lamentablemente, no es sino la confirmación de lo que ya había dicho el secretario general del PSOE de Cuenca, José Luis Martínez Guijarro, a finales del mes de septiembre. Además de que “se demuestra que el delegado de la Junta en Cuenca, Rogelio Pardo, faltó a la verdad cuando negó este extremo, intentando hacernos creer que las obras se habían ralentizado pero no parado. Suponemos que intentaba tapar la falta de compromiso de sus superiores con esta ciudad y esta provincia”.
Desde el PSOE de Cuenca subrayan que “la crisis no empezó en mayo, cuando el PP accedió al Gobierno regional, sino que llevamos ya tiempo con ella, pero la anterior Administración socialista, con José María Barreda a la cabeza, la fue capeando con responsabilidad y prudencia, haciendo frente a sus compromisos”. El problema, añaden, “es que en el PP se han dado cuenta cuando han empezado a gobernar de que gestionar es priorizar y por tanto, en su listado de prioridades, no están ni la ciudad ni la provincia de Cuenca”.
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