La Diputación de Cuenca celebró la festividad del Sagrado Corazón de Jesús con una eucaristía en la residencia provincial. El presidente Álvaro Martínez Chana destacó el valor de los mayores y reafirmó el compromiso con los Servicios Sociales, fortaleciendo la conexión entre la institución y los residentes en un ambiente emotivo.
La
Diputación de Cuenca ha conmemorado este viernes la festividad de su patrón, el
Sagrado Corazón de Jesús, con una jornada entrañable en la residencia provincial que lleva su nombre, donde se ha celebrado una solemne eucaristía oficiada por el obispo de la Diócesis de Cuenca,
José María Yanguas.
El presidente de la Diputación, Álvaro Martínez Chana, ha asistido al acto acompañado de varios diputados provinciales y del director de la residencia, Francisco Ibáñez. Tras la misa, celebrada en la capilla del propio centro, autoridades y residentes han compartido un aperitivo amenizado por música en directo, en un ambiente de convivencia y cercanía.
Durante el encuentro, Martínez Chana ha puesto en valor el papel fundamental que desempeñan los mayores en la sociedad, destacando que “es de justicia, en una sociedad avanzada, que nuestros mayores reciban el mayor de los cuidados, ya que fueron ellos quienes hicieron posible que hoy disfrutemos de unos altos niveles de bienestar”.
El presidente provincial ha reafirmado el compromiso de la institución con los Servicios Sociales, y especialmente con la residencia provincial, que considera una de sus mayores expresiones. “Debemos seguir apostando por estos recursos para devolverles, aunque sea una parte, de todo lo que han dado, y aprovechar su experiencia y sabiduría para seguir construyendo un Estado del Bienestar sólido y justo”, ha señalado.
La jornada ha servido no solo para celebrar la festividad del patrón de la Diputación, sino también para fortalecer los lazos entre la institución provincial y los usuarios de este centro asistencial, en una cita marcada por la emotividad, la gratitud y el compromiso social.
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