La Balompédica lucha contra la despoblación con el programa “Goles por mi pueblo”

La labor social de la Unión Balompédica Conquense sigue creciendo temporada a temporada a raíz de la retadora situación actual que vive la propia provincia de Cuenca. En pleno debate por la despoblación, la entidad blanquinegra lanzó el pasado año el programa “Goles por mi pueblo”, una iniciativa que promueve el desarrollo deportivo de las futuras generaciones de los pueblos de nuestra provincia ante la amenaza de la falta de servicios o infraestructuras.

“Goles por mi pueblo” se crea con el objetivo de ayudar a las familias que viven en entornos rurales de la provincia para que sus hijos e hijas puedan desarrollar su pasión por el fútbol con normalidad. La situación en los municipios obliga a las familias a desplazarse hasta otros municipios o la propia capital ante la falta de clubes en categorías base o infraestructuras, con el consiguiente esfuerzo, tiempo y dinero que ello supone.

Esta supone una amenaza al desarrollo deportivo de las futuras generaciones de estos entornos, ya que si las familias no pueden asumir ese gasto, puede llevar al abandono de la actividad en el peor de los casos. Por ello, la Unión Balompédica Conquense lanzó este programa por el que el club subvenciona el 85% del coste anual a familias que tengan que desplazarse desde municipios de más de 25 kilómetros de distancia de la capital.

Se trata de una ayuda con el doble objetivo de amortiguar el gasto en desplazamientos semanales, además de fomentar que las familias puedan seguir habitando nuestros pueblos mientras sus hijos e hijas pueden seguir jugando al fútbol en Cuenca.

En la primera temporada de esta iniciativa, se acogieron al programa “Goles por mi pueblo” un total de 14 familias con origen en municipios de Palomares del Campo, Huete, San Lorenzo de la Parrilla, Zarzuela, Olmeda del Rey o Cañizares entre otros. Esta temporada 2022/23, se ha incrementado hasta las 18 familias dentro del programa “Goles por mi pueblo”.

De esta forma, el Conquense pone su granito de arena en la lucha contra la despoblación, al tiempo que impulsa la práctica del deporte en nuestras futuras generaciones sin que la distancia o los desplazamientos suponga una barrera añadida.