El delegado de la Junta en Cuenca, Ángel Valiente, visitó hoy las zonas afectadas por la tormenta de granizo caída este fin de semana en La Mancha conquense donde avanzó que los técnicos del Gobierno regional, dependientes de las Oficinas Comarcales Agrarias, están desde esta misma mañana trabajando sobre el terreno para comprobar los daños producidos por el granizo.
A falta de los informes de los técnicos para saber con exactitud las hectáreas dañadas, los cultivos de ajo, viñedo, cebolla y cereal en los términos municipales de Las Mesas, Las Pedroñeras y El Pedernoso se perfilan como los más afectados. En este punto, Valiente señaló que el ajo temprano está a punto de recogerse, por lo que “habrá que acelerar los trabajos de evaluación”.
Con el fin de establecer los mecanismos de ayuda permitentes para los agricultores afectados, el delegado de la Junta y el subdelegado del Gobierno en Cuenca, Julio Magdalena, mantuvieron esta mañana reuniones de trabajo con los alcaldes de los municipios perjudicados por el granizo, así como con representantes de las organizaciones agrarias y de las cooperativas de la zona.
Una “voz única”
Valiente explicó que tanto Gobierno regional como subdelegación del Gobierno en Cuenca pretenden ir de la mano de cara a la tramitación de los expedientes de ayuda, con el objetivo de tener una “voz única” que permita agilizar las posibles compensaciones. En este contexto, instaron a los primeros ediles a celebrar sesiones plenarias para iniciar la tramitación de las ayudas. En el caso de Las Mesas se celebrará esta misma noche y en el de Las Pedroñeras se convocará a finales de esta semana.
Del mismo modo, argumentó que las ayudas irán en función de la cosecha puesto que “no podemos saber la acepción que ha tenido el granizo sin conocer cuál ha sido la bajada de la producción media”.
No existe la declaración de zona catastrófica
Por su parte, el subdelegado del Gobierno en Cuenca, Julio Magdalena, recordó a los alcaldes de los municipios afectados que no existe la declaración de zona catastrófica como tal, y añadió que desde el Ejecutivo central existen dos líneas de ayudas diferenciadas. Una primera derivada de la propia emergencia, que abarca a aquellos enseres, mobiliario, maquinaria o caminos que hayan resultado dañados. Y, por otra parte, una segunda línea para paliar los daños ante un hecho meteorológico concreto.
Magdalena subrayó que “es importante aunar los daños para que, sumando, sea mucha más extensión la afectada que tomado aisladamente”, en referencia a la conveniencia de presentar ante el Ministerio del Interior un expediente conjunto para que se habiliten las ayudas pertinentes. Posteriormente, tendría que publicarse un Real Decreto específico ante este fenómeno meteorológico adverso.
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