La provincia de Cuenca vivirá este miércoles una jornada marcada por el calor y el riesgo de incendios. Aunque el aviso amarillo por altas temperaturas se activa únicamente en las comarcas albaceteñas de Hellín y Almansa —donde se podrían alcanzar los 36 grados—, en la capital conquense también se espera un día caluroso, con temperaturas máximas de hasta 33 grados.
Según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), en el conjunto de Castilla-La Mancha las temperaturas máximas tenderán a descender, aunque de manera ligera o sin cambios en zonas como Guadalajara y el noroeste de Toledo. En Cuenca, las mínimas se situarán en torno a los 19 grados, manteniéndose estables respecto a días anteriores.
Los cielos estarán parcialmente cubiertos con intervalos de nubes medias y altas, y no se descartan chubascos dispersos acompañados de tormentas, especialmente en el tercio oriental de la región. El viento será flojo de dirección variable, pero tenderá a componente oeste durante las horas centrales del día y arreciará hasta moderado del este y nordeste en la mitad norte al final de la jornada.
Alerta por incendios en Cuenca
El calor y la sequedad del ambiente han llevado al Servicio de Prevención y Extinción de Incendios Forestales de Castilla-La Mancha (Infocam) a declarar un riesgo muy alto de incendios forestales en el este de Cuenca, así como en el sureste de la provincia de Albacete. El Índice de Propagación Potencial (IPP) también señala un riesgo alto en otras zonas de Cuenca y Ciudad Real.
Ante esta situación, se recomienda extremar las precauciones en entornos rurales y evitar cualquier actividad que pueda generar chispas o llamas en el medio natural.
Cuenca se enfrenta así a una jornada de intenso calor y alta peligrosidad por incendios, lo que obliga a extremar el cuidado tanto en el entorno urbano como en el natural.