El Gobierno de Castilla-La Mancha, con el apoyo de las autoridades locales de Villar de Olalla, ha destinado más de seis millones de euros en ayudas al bienestar animal, beneficiando a cientos de ganaderos y fomentando la incorporación de jóvenes al sector ganadero para garantizar el futuro del medio rural.
El Gobierno de Castilla-La Mancha, a través de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, ha destinado en lo que va de año más de seis millones de euros en ayudas al bienestar animal para ganaderos y ganaderas de toda la región. Así lo ha explicado la directora general de Ordenación Agropecuaria, Lydia Benítez, durante una visita a una explotación ovina de Villar de Olalla.
Estas ayudas, incluidas en el Plan de Desarrollo Rural 2014-2022, han beneficiado a 2.132 expedientes y buscan compensar los esfuerzos de los ganaderos en mejorar las condiciones de vida de sus animales, especialmente en regímenes extensivos y semiextensivos de ovino y caprino. La directora general ha subrayado que estas iniciativas no solo mejoran el bienestar animal, sino que también elevan la calidad de las producciones, beneficiando tanto a productores como a consumidores.
Durante su visita, acompañada por el delegado provincial Rodrigo Fernández y el alcalde de Villar de Olalla, Daniel Ayllón, Benítez también destacó las ayudas dirigidas a la incorporación de jóvenes al sector ganadero, que suman más de 17 millones de euros entre 2023 y 2024. Estas ayudas han permitido que 362 jóvenes emprendan en la ganadería, contribuyendo al relevo generacional y la fijación de población en el medio rural.
El ganado ovino es la opción mayoritaria entre los nuevos ganaderos, seguido del bovino y caprino, que juntos representan el 76% de las incorporaciones en 2024. Además, un tercio de los jóvenes incorporados son mujeres, reflejando la creciente presencia femenina en el sector.
Con estas medidas, el Ejecutivo regional reafirma su compromiso con la sostenibilidad y el desarrollo del medio rural en Castilla-La Mancha.