Durante poco más de diez días (desde el 2 al 13 de septiembre), la gastronomía ha sido el eje central de la ciudad de Cuenca. El ayuntamiento de Cuenca, a través del Plan de Sostenibilidad Turística, ha conseguido que organizaciones públicas, privadas y ciudadanía se volcaran en conseguir un objetivo común: que Cuenca sea la próxima Capital Española de la Gastronomía. Para ello, se ha reunido a los y las chefs más destacados de la ciudad para que sirvieran sus mejores platos en los lugares más emblemáticos y destacados.
Cuando el pasado lunes día 2 de septiembre el alcalde de Cuenca, D. Darío Dolz anunciara la candidatura, señaló que la intención era “unir la raíz gastronómica de la ciudad con la calidad, arropada por los participantes y la ciudadanía”. Por ese motivo, para esta tercera ocasión (la ciudad se presentó en otras dos), la organización ha querido organizar actividades que aunaran gastronomía, cultura, patrimonio y naturaleza.
Muestra de la implicación y el interés de la ciudadanía, es que las plazas para participar en las actividades se agotaron en menos de 24 horas. Para lograr la unión entre gastronomía, cultura patrimonio y naturaleza, se han elegido emplazamientos como los museos de la Fundación Antonio Pérez o Antonio Saura o el Museo Paleontológico y el de las Ciencias, para representar la parte cultural; el Puente de San Pablo como emblema del patrimonio y junto a los ríos Júcar y Huécar o en globo, como mejor escaparate del entorno natural. Todo ello, para el disfrute de las más de 400 personas que han podido participar en las visitas, catas, degustaciones y cenas.
Cocina de vanguardia con fin solidario
Los menús elaborados para la ocasión por los chefs han incluido platos y productos tradicionales, pero con un toque vanguardista. Como ejemplo, las personas que han asistido a las actividades han podido degustar un “Mojete 2.0”, “Tarta de queso de Villarejo, puré de frambuesas de Valdemeca y tierra de galletas artesanas” y hasta un “Huevo de compsognathus longipe” compuesto por migas manchegas, boletus y huevo de gallina tradicional. Además, las cenas han dejado un mejor sabor de boca, si cabe, ya que todo lo recaudado en cada evento ha ido a parar a distintas asociaciones que trabajan con colectivos vulnerables de la ciudad.
Pase lo que pase, la candidatura de la ciudad para ser Capital Española de la Gastronomía 2023 ha sido todo un éxito. Toda la ciudad se ha volcado y ahora solo falta que el jurado elija la que considere mejor candidata, y esto será el próximo 18 de noviembre. No obstante, si Cuenca lograse la capitalidad, hay ya previsto seguir con actividades similares a las ya realizadas para el disfrute de conquenses y visitantes.
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