La Junta clausura el RECUAL que ha permitido acondicionar la Fuente de los Tres Chorros y el parque de Alonso Céspedes en Horcajo de Santiago

La delegada provincial de Economía, Empresas y Empleo, Arancha Poveda, ha clausurado este martes el Programa de Recualificación y Reciclaje Profesional (RECUAL) que ha permitido acondicionar la Fuete de los Tres Chorros y el parque de la calle Alonso Céspedes en la localidad de Horcajo de Santiago.

Poveda ha entregado los Certificados Profesionales a las personas participantes junto a la alcaldesa, María Roldán, y la portavoz del Grupo Socialista y diputada provincia, Maite Megía. Además, ha querido comprobar cómo han quedado los proyectos subvencionados, visitando las obras.

La delegada provincial ha explicado que los RECUAL “son programas de empleo que combinan la formación con un contrato laboral, de manera que la persona beneficiaria puede adquirir nuevas competencias para el empleo mientras recibe una remuneración”.

En el caso de Horcajo de Santiago, este Programa RECUAL ha permitido la contratación de ochos personas, todas ellas mujeres, que han recibido su correspondiente Certificado de Profesionalidad como Auxiliares de Acabados Rígidos y Urbanización, “lo que les va a permitir ampliar sus perspectivas laborales”.

Además, gracias a ello también se han podido acometer mejoras en el municipio. En concreto, se ha acondicionado la Fuente de los Tres Chorros, renovando el pavimento y el mobiliario urbano para embellecer la zona, además de actuar sobre la red de saneamiento y las canalizaciones

Asimismo, se ha intervenido en el parque de la calle Alonso de Céspedes, donde se han reestructurado los espacios interiores, cambiado las soleras y el pavimento, eliminado barreras arquitectónicas, acondicionado las zonas verde y renovado el mobiliario urbano y la zona de juegos infantiles.

Para todo ello, la Junta ha realizado una inversión cercana a los 95.000 euros.

Poveda ha recordado que el año pasado la Junta también concedió un Programa RECUAL al Ayuntamiento de Horcajo de Santiago, subvencionado con los 92.000 euros, que permitió mejorar los accesos de dos espacios emblemáticos, como son las Ermitas de Santa Ana y San Sebastián.