Más de 20.000 personas de toda España se han concentrado este domingo en el céntrico Paseo del Prado de Madrid bajo el lema “Salvemos el Mundo Rural Agredido”, en una multitudinaria manifestación que ha mezclado reivindicaciones contra las agresiones especulativas y el abandono que sufre la España vaciada.
Entre los colectivos participantes, Cuenca Ahora ha tenido un papel destacado, visibilizando los problemas que afectan a la provincia de Cuenca, como la despoblación, el cierre de paradas de autobús, el deterioro de la sanidad rural, la proliferación de macrogranjas y plantas de biogás, y la imposición de proyectos energéticos sin participación ciudadana.
El manifiesto, redactado por el escritor Javier Sierra y leído junto a la activista Rosa Arranz y el científico del CSIC Fernando Valladares, ha sido un alegato emotivo en defensa de la vida en los pueblos y un clamor contra los intereses especulativos que, según los organizadores, “están matando nuestros pueblos y los de nuestros abuelos”.
Durante la marcha, los colectivos castellano-manchegos denunciaron la falta de una planificación justa y sostenible del territorio. David Cardeñosa, coordinador provincial de Cuenca Ahora, afirmó: “Cuenca ha estado este domingo en Madrid defendiendo lo que es de todos: el derecho a vivir en nuestros pueblos con dignidad. Somos una tierra rica en recursos, pero pobre en decisiones políticas. Esta manifestación demuestra que la gente está cansada de promesas vacías y exige soluciones reales. Desde Castilla-La Mancha hemos gritado alto y claro que no queremos ser un territorio de sacrificio, sino un lugar con futuro.”
La jornada reunió a casi medio millar de colectivos rurales de toda España y sirvió para reclamar una sanidad pública igualitaria, un transporte digno, una PAC justa y un modelo energético que respete el territorio.
El acto concluyó en la Plaza de Cibeles, donde el sonido de los bombos del Bajo Aragón marcó el latido simbólico de un mundo rural que sigue vivo gracias al compromiso de sus gentes.