Cáritas Diocesana de Cuenca continúa desarrollando una labor imprescindible en la atención a personas en situación de exclusión social, defendiendo su dignidad, reconociendo sus capacidades e impulsando su integración y desarrollo. Su acción se extiende desde la cobertura de necesidades básicas, como la alimentación, hasta programas de acompañamiento residencial, formación y empleabilidad.
Uno de los pilares fundamentales de esta labor es la atención a personas mayores y/o con dependencia o discapacidad. A través del Servicio de Comidas a Domicilio, se garantiza una dieta equilibrada prescrita por profesionales sanitarios, que llega cada día del año a quienes más lo necesitan. Durante el primer semestre de 2025, se han prestado 14.728 servicios, beneficiando a 132 personas en 111 hogares —90 de ellos unipersonales—. Las personas atendidas se dividen en tres franjas de edad:
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15 personas entre 35 y 64 años
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31 personas entre 65 y 80 años
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86 personas mayores de 80 años
Cáritas cuenta con una cocina habilitada y homologada por Sanidad y el Ayuntamiento de Cuenca, así como con tres vehículos isotérmicos para el transporte de los alimentos.
Atención a personas sin hogar
La entidad también desarrolla proyectos de acogida residencial para personas sin hogar, brindando un espacio digno y cálido. En el Centro Residencial Puede Ser han sido acogidos 6 hombres, mientras que en el Centro Residencial Sin Fronteras se ha atendido a 17 personas (9 hombres y 8 mujeres) durante el primer semestre. Ambos proyectos cuentan con la financiación de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha a través de la asignación tributaria del IRPF.
Empleo y formación para la inclusión
La formación sociolaboral es otro eje clave. A través de itinerarios de inserción y procesos formativos, Cáritas impulsa la empleabilidad de las personas participantes, promoviendo contrataciones como la realizada en la tienda de ropa de segunda mano RopaCor, donde se ha incorporado una persona tras su paso por el itinerario formativo. Estos programas buscan no solo una mejora profesional, sino también personal y social.
Apoyo institucional
Toda esta labor se realiza gracias al apoyo y la cofinanciación de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, a través de la convocatoria con cargo a la asignación tributaria del IRPF y del Impuesto sobre Sociedades, permitiendo dar continuidad a estos programas esenciales.
Cáritas Diocesana de Cuenca recuerda que su trabajo se fundamenta en la solidaridad, el acompañamiento y la justicia social, y que “caminar juntos como un solo pueblo”, como recuerda el Papa León XIV, es la mejor forma de construir una sociedad más humana, fraterna e inclusiva.