Los 180 trabajadores de Pinasa, en Fuentes (Cuenca), protestan por retrasos en el pago de nóminas, acumulando casi dos meses y medio sin cobrar. Los sindicatos UGT FICA y CCOO denuncian la falta de comunicación de la empresa y advierten que continuarán luchando hasta que se cumplan las obligaciones salariales.
La plantilla de la empresa Pinasa, ubicada en la localidad conquense de Fuentes, ha vuelto a concentrarse este lunes a las puertas de la fábrica para denunciar la dramática situación laboral que viven desde hace más de un año. Los 180 trabajadores y trabajadoras llevan soportando continuos retrasos en el pago de sus nóminas y acumulan ya cerca de dos meses y medio sin cobrar, una situación que está generando un fuerte desgaste emocional y económico en las familias afectadas.
La concentración, convocada por los sindicatos UGT FICA y CCOO, ha vuelto a visibilizar la falta total de comunicación por parte de la dirección de la empresa, que hasta la fecha no ha ofrecido ninguna reunión ni contacto con el comité de empresa.
Jesús Laín (UGT FICA) y Diego Martínez (CCOO) han comparecido ante los medios de comunicación para explicar “el estado de agonía mental y psicológica en el que se encuentran muchas personas trabajadoras, incapaces de hacer frente a sus gastos más básicos mientras acuden cada día a su puesto de trabajo sin recibir nada a cambio”.
“Nos sentimos abandonados. No hay nadie que venga a ver lo que está pasando. Ni desde la dirección de Pinasa ni desde las administraciones. Estamos cansados de aguantar esta incertidumbre. Somos 180 familias las que vivimos de esta empresa”, ha expresado uno de los portavoces sindicales.
Ambos sindicatos han dejado claro que la lucha continuará el tiempo que sea necesario, y advierten de que no van a parar hasta que la empresa cumpla con sus obligaciones salariales. "Es inaceptable que una empresa con este peso en el empleo local esté sumida en esta situación sin que nadie actúe", han señalado.
La empresa Pinasa, dedicada al sector maderero, es uno de los principales motores económicos del municipio de Fuentes y de la provincia de Cuenca, lo que agrava aún más la preocupación sobre su viabilidad si no se encuentra una solución urgente.