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Francisco León Meler, el arquitecto que hizo de Cuenca su obra maestra
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Francisco León Meler, el arquitecto que hizo de Cuenca su obra maestra

Por Redacción
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localcuencanewses/5/5/16
sábado 01 de noviembre de 2025, 00:38h

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La sede del Colegio de Arquitectos de Cuenca acoge la exposición “Francisco León Meler – Arquitecto del siglo XX”, un homenaje al creador de algunos de los proyectos más emblemáticos de la ciudad, como la rehabilitación de las Casas Colgadas. La muestra, que reúne planos, maquetas y dibujos originales, podrá visitarse hasta diciembre.
La sede del Colegio Oficial de Arquitectos de Castilla-La Mancha (COACM) en Cuenca acoge desde ayer la exposición “Francisco León Meler – Arquitecto del siglo XX”, un homenaje a quien definió buena parte de la imagen moderna de la ciudad. La muestra, inaugurada en la tarde del 30 de octubre, ofrece un recorrido por la trayectoria y el pensamiento de León Meler (1927–2010) a través de planos, maquetas, bocetos y fotografías originales que podrán visitarse hasta diciembre.

El acto de inauguración contó con la presencia de la decana del COACM, Elena Guijarro; el presidente de la Demarcación en Cuenca, Juan José Ramón; la delegada provincial de Fomento, Ana Ponce; los hijos del arquitecto, Daniel y Pablo León Irujo; y el arquitecto José Antonio Herce, miembro de la comisión técnica de la Fundación Docomomo, además de numerosos compañeros, familiares y amigos del homenajeado.

Organizada por la Demarcación conquense del COACM con el patrocinio del Consorcio de la Ciudad de Cuenca y ASEMAS, la exposición reúne fondos cedidos por los hijos del arquitecto, con diseño y montaje de Enrique Martínez Gil y reportaje fotográfico de David Culebras. En total, unos cuarenta paneles y ocho maquetas reflejan la evolución creativa de un profesional que conjugó la modernidad arquitectónica con el respeto al entorno histórico.

Un legado decisivo en la arquitectura de Cuenca
Francisco León Meler fue arquitecto municipal de Cuenca entre 1958 y 1965, además de arquitecto del Instituto Nacional de la Vivienda y de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha. Entre sus aportaciones más notables figura la rehabilitación de las Casas Colgadas para albergar el Museo de Arte Abstracto Español, una intervención reconocida por su sobriedad y precisión técnica.

También fue autor del Plan de Ordenación Municipal de 1963, junto a Julio Cano Lasso y Alejandro Blond, y del proyecto de declaración patrimonial del casco antiguo de Cuenca como Ciudad de Interés Histórico y Pintoresco en 1962. Su huella se extiende además por toda la provincia con obras como el Poblado Obispo Laplana (Las 500), los polígonos de San Antonio y La Paz, el Colegio Menor María de Molina, el Hostal Cortés, la Capilla de La Merced o la restauración de la iglesia de Santa Cruz en Carboneras de Guadazaón.

Su arquitectura, rigurosa y contenida, se caracteriza por el equilibrio entre funcionalidad y expresión plástica, con un lenguaje de volúmenes y texturas que le confirió una identidad propia dentro de la generación de arquitectos formados en la Escuela de Madrid junto a Javier Carvajal, Antonio Lamela o Cano Lasso.

Un homenaje cargado de emoción
Durante la inauguración, Elena Guijarro subrayó “la importancia de recuperar y difundir el legado de arquitectos que configuraron la imagen moderna de nuestras ciudades”, y agradeció a la Demarcación conquense su esfuerzo por promover iniciativas que “permiten reconocer la obra y la humanidad de profesionales como León Meler”.

Juan José Ramón destacó que la exposición “es un merecido homenaje a un arquitecto cuya huella está presente en la trama urbana y en la memoria colectiva de Cuenca”, mientras que Ana Ponce mostró su emoción al descubrir que León Meler fue en su día arquitecto de la delegación de Fomento.

Daniel León Irujo, comisario de la exposición, recordó la amplitud de la obra de su padre, presente en más de 50 municipios de la provincia. Su hermano Pablo ofreció una intervención más personal, evocando la figura de su madre, Mercedes Irujo, y de los colaboradores del estudio familiar, “más que un equipo, una familia”. Añadió que su padre “trabajó de forma incansable y discreta, ajeno al dinero y a los reconocimientos, pero profundamente agradecido”.

Por su parte, José Antonio Herce recordó que “Francisco León Meler fue el discreto arquitecto detrás de la adaptación de las Casas Colgadas para el Museo de Arte Abstracto, una pequeña intervención de enorme trascendencia que pronto alcanzó fama internacional”.

Una exposición que reivindica el dibujo y la creación
La muestra, que puede visitarse hasta diciembre en la sede del Colegio de Arquitectos de Cuenca (de 10 a 14 horas, con visitas guiadas los jueves de 18 a 20 horas), va más allá del homenaje: reivindica el valor del dibujo como herramienta esencial del pensamiento y la creación arquitectónica, y celebra la vigencia de una obra que sigue inspirando a las nuevas generaciones.

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